Levi siempre amó la Navidad,la muerte de su madre y su mala experiencia con su ex contribuyeron a que se alejara un poco de esa festividad.Conocerá a alguien con quién volver a disfrutar de ella y ese no es otro que su jefe.
Imagen de portada de la...
¡Hola! Os deseo unas Felices Fiestas y que estéis pasando unas bonitas Navidades.
Espero que os gusteeste fic navideño ❤
▪︎ 𝑳𝒆𝒗𝒊 𝑨𝒄𝒌𝒆𝒓𝒎𝒂𝒏 ▪︎
El ruido del despertador me sacó de ese hermoso sueño que estaba teniendo,lo miré...Oh...¡bien!,todavía faltaban unos quince minutos para las seis y media,así que metí mi cabeza debajo del edredón e intenté poner un final feliz a ese precioso sueño que había sido interrumpido.
Aprovechar esos pocos minutos antes de levantarme era de los mejores momentos del día,todo el tiempo que estuve con Mike fue algo prohibitivo,arreglar su ropa,preparar el desayuno,o incluso satisfacerlo sexualmente aunque no me apeteciera en ese momento era mi obligación por las mañanas.Siempre se hacía cuando él quería y como él quería,yo le obedecía sin rechistar ya que de lo contrario ya sabía lo que me esperaba.No sé en que momento pasé de ser su pareja para convertirme en su...¿esclavo?
El primer año con él fui realmente feliz, me consentía en todo,me sentía amado,respetado,pero poco a poco se fue volviendo celoso incluso a veces violento, éste último año fue el peor,ya no soportaba sus insultos ni sus golpes,sobre todo cuando volvía bebido,pensaba que me follaba a todo lo que se movía,poco a poco fue matando el amor que sentía por él.Lo que si era verdad es que desde hacía tiempo suspiraba en silencio por una persona,el cuál era el dueño de mis sueños,pero sólo eso...de mis sueños...bueno y de mi corazón también.
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A las siete y cuarto salí de mi apartamento en dirección a la estación de trenes,hace ya un par de meses que me atreví a dejar a Mike,desde ese día decidí mimarme un poco,así que todos los días compraba mi almuerzo a la señora Hanji una mujer un tanto alocada pero que vende unos bentos realmente deliciosos en un puesto que tiene en la misma estación de trenes, por poco más de setecientos yenes.
Se notaba que faltaban apenas un par de días para Navidad,Tokio era una maravilla por esas fechas,la ciudad rebosaba ambiente navideño por los cuatro costados. Mamá me enseñó a amar la Navidad,todavía recuerdo con nostalgia esas maravillosas cenas de Navidad que preparaba.Después de la cena nos reuníamos al calor de la chimenea para que Farlan y yo abrieramos los regalos,los cuáles mamá se había encargado de empaquetar con tanto cariño,aunque siempre le hacíamos pensar que creíamos que no había sido ella sino Papá Noel,a ella eso le hacía feliz.
Pero Mike se encargó de matar el poco espíritu navideño que me quedó después de la muerte de mamá,ni un miserable árbol de Navidad me permitía poner,pero este año iba a ser diferente,después de trabajar tenía pensado ir a unos grandes almacenes que quedaban cerca de la oficina y comprar uno aunque fuera pequeñito.
Faltaban pocos minutos para las ocho cuando llegué a la oficina,Petra se estaba encargando de poner los últimos adornos en el árbol de Navidad. Nuestro jefe había decidido que la oficina también tuviera ambiente navideño,era la primera Navidad que pasaba en la empresa,se incorporó poco después de empezar el mes de Febrero sustituyendo al Sr.Pixis,al cuál ya le había llegado la hora de la jubilación,un carcamal protestón aunque con buen corazón.
