No eres el típico idiota.

Epílogo.

Ya ha pasado un año desde que nació mi pequeña Naomi, tiene los ojos de James, mi color de piel y el cabello de un castaño aún más claro que el mío.

Un año, desde que ví a mi madre entrar en esa blanca habitación...

*Flashback*

-Hola hija- dijo mamá dejando caer una lágrima mientras se acercaba a mí y depositaba a la pequeña Naomi en mis brazos.

-Mamá... Estás aquí...- no podía contener las lágrimas, esto parecía ser tan irreal.

-Hija, perdóname por haberte dejado tanto tiempo... Y lamento haberme perdido cosas tan importantes que han pasado en tu vida; cosas maravillosas como Naomi, o James. Es todo lo que una madre desea para su hija, y tú lo has cumplido pero a tu manera. Emily, hija, por favor perdóname, prometo que nunca volveré a dejarte sola- dijo acariciando mi mejilla.

No podía contener las lágrimas.

-Mamá... No tienes que disculparte... No sabes cuanto extrañé todo este tiempo... Aún no puedo creer que estés aquí conmigo- una lágrima cayó por mi mejilla y nos abrasamos muy fuerte durante un largo tiempo con Naomi entre nosotras.

*fin del flashback*

Estaba jugando con mi pequeña mientras James se daba una ducha, llevaríamos a Naomi al parque.

-¡Ya estoy listo para mis chicas! -dijo James alegre.

-Papá-pronuncio nuestra pequeña.

A James se le llenaron los ojos de lágrimas y una sonrisa gigante surgió en su rostro, era la primera palabra de Naomi, y fue "papá"

-Oh, no es justo -dije gruñona. -debía decir mamá primero.

-No seas envidiosa, sabes que me quiere más. -bromeó.

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Hasta ahora, todo ha sido maravilloso, bueno, obviamente con altos y bajos, pero para mí ha sido sin duda el mejor año de mi vida.

Vivo con James y Naomi en nuestro departamento en Londres, mi madre volvió con mi padre, ellos ahora están bien, y viven en Londres en un pequeño departamento cerca del nuestro, decidí perdonar a papá, pero fue sólo por mamá; ahora hablamos y todo eso pero nada ha vuelto a ser lo mismo desde entonces.

La pequeña Naomi es un amor. Todo el día está sonriendo y casi nunca llora; James está más que feliz con ella, dice sentirse completo, que tiene todo lo que alguna vez quiso y necesita.

Esta es una nueva etapa de mi vida, de la cual voy a disfrutar a cada momento como si fuera el último.