Imagina... Con Lauren Jauregui.

¡Sé valiente! (Especial Diciembre 4/10)

El sol era abrumador. Las gotas de sudor bajaban por nuestras frentes, pero nos manteníamos firmes en el campo de tierra. La Teniente Coronel _____ (Tu apellido) caminaba entre nuestras filas observándonos en silencio a través de sus gafas de sol, mientras mascaba chicle. Ramsey, una de mis compañeras, suspiraba de manera discreta cada vez que percibía que la Teniente se acercaba. Estaba así desde que la vio en top y joggers, ayudando a descargar uno de los camiones.

-Muy bien soldados, descansen. -Dijo la Teniente y todos relajamos nuestra postura. -Me alegra saber que ahora todos ustedes son soldados de primera clase. De todas formas no iba a permitir algo menor en mi batallón. Espero que entiendan que ahora no tienen otra opción que seguir escalando y lo más pronto posible, no acepto mediocres. Y esta vez debe tardarse menos, Scott. -Me dijo cerca y yo me mantuve inexpresivo, pero por dentro mi orgullo se tambaleó. Yo había sido el último en alcanzar el rango de primera clase. -En fin, se preguntarán por qué los hice reunir tan temprano. Hemos recibido una solicitud del FBI para apoyarlos en una operación importante contra narcotraficantes. Sabemos que éso no debería ser de nuestra incumbencia, pero el enemigo tiene armas de explosión masiva y necesita cinco de nuestros mejores soldados. Basta con decir que serán sometidos a diferentes pruebas para su selección. Por éso, quiero que conozcan a alguien. Damas y caballeros. -Ella se colocó frente a todos y una mujer apareció colocándose a su lado. -Quiero presentarles a la Agente Especial al Mando Jauregui. Ella será quien escoja los cinco mejores de ustedes para la operación. Agente, le presento al batallón ciento catorce de la unidad de Los Ángeles.

Mi vista se fijó en la mujer esplendorosa que nos sonreía cómplice. Se quitó los lentes de sol para observarnos mejor. Y yo estaba suficientemente cerca para saber que tenía unos ojos verdes increíbles. Estaba vestida formalmente con una falda pegada al cuerpo y una camisa blanca de botones un poco holgadas. Tenía unos tacones de color negro, y su cabello estaba colocado a un lado de su rostro. Era una mujer espectacular. Quedé deslumbrado al instante por su belleza. Debía salir con ella. Era increíblemente hermosa.

-Buenas tardes, damas y caballeros. -Su sonrisa deslumbrante no desaparecía de su rostro. -Estoy muy contenta de poder conocernos formalmente. La Teniente _____ ha mencionado varias veces que tiene muchas expectativas con ustedes, espero no me defrauden.

-No lo harán, Agente. -Respondió la Teniente. Ellas se lanzaron unas sonrisas cómplices. -Muy bien, soldados, a partir de mañana iniciarán con las pruebas correspondientes. Por hoy se limitaran a sus rutinas, rompan filas. -Y todos obedecimos. Y noté que no fui el único deslumbrado por la belleza de la Agente.

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-¡MUÉVANSE, PEDAZOS DE MIERDA! -Gritaba la Teniente mientras nosotros luchábamos por superar los obstáculos de la prueba que estábamos haciendo. Ya yo había caído al lodo como diez veces. -¡LO ÚNICO QUE HACEN ES AVERGONZARME FRENTE A LA AGENTE! ¡NO ME SORPRENDERÍA SI JUSTO AHORA SE DA MEDIA VUELTA Y SE MARCHA DE AQUÍ!

Ramsey era la única que había llegado a la meta, y sin ningún problema. Por alguna razón se esforzaba al máximo para llamar la atención de la Teniente. Podía ver su cara satisfecha desde los bancos de descanso. Se burlaba de nosotros. Estúpida.

La causa de nuestras estrepitosas fallas era porque la Agente Jauregui estaba presente, vestida con un mono deportivo ajustado de color azul marino, y un top gris, dejando ver su abdomen. Tenía unas botas militares, y una gorra negra con las letras del FBI bordadas en blanco. Si antes nos había parecido atractiva, ahora jamás podríamos sacar su figura de nuestra mente. Ella parecía divertirse con lo que veía. Su sonrisa no desaparecía de su rostro, incluso soltaba pequeñas carcajadas con los insultos de la Teniente. A pesar de que se divertía a nuestra costa, se veía completamente adorable.