-¿Sabes cuan difícil fue para mí conseguir que la imprenta me diera más tiempo?- y ahí iba Lee Jinki otra vez
-No es mi culpa, le dije a la mangaka el plazo de tiempo, pero ella solo me ignoro, hasta fui a ayudar, pero no han terminado, le faltan seis páginas- dijo enojado
-Bueno pues tú cómo su editor tendrás que tomar la responsabilidad- Taemin frunció el ceño - tú castigo viene en camino-
¿En camino?
¿El castigo?
En ese momento no lo entendió si no que lo hizo a la hora del almuerzo cuando su jefe llegó con un hombre alto, moreno y con esa hermosa sonrisa en su rostro
Lo entendió cuando Jinki le dijo un corto: "deberás entrenarlo"
Y Taemin, él lo vio sentado desde su lugar sin poder quitar la mirada y con su corazón bombeando rápidamente contra su caja torácica
Él no se enamoraba fácilmente
O eso creía
Pero cuando vio a ese hombre algo se removió en su interior, una sensación de calidez se colocó en su pecho y lo que parecían ser mariposas revolotearon felices en su estómago
-¿Como te llamas?- le dijo el moreno cuando todos se retiraron y solo ellos dos quedaron en la mesa
Taemin miro a otro lado porque esa voz...con esas simples tres palabras había logrado que su cara se repartiera de un rosa cálido
-Taemin...Lee Taemin-
-¿Ah si? Es un lindo nombre, yo soy Choi Minho...es un placer conocerte Tae- y esa sonrisa...esa sonrisa amenazó con llevarse todo lo que lo atormentaba
Y luego vinieron todas esas acciones que lo dejaban sin habla
Minho esperándolo en la puerta de la editorial para entrar juntos
Un café en su escritorio cuando entraba tarde
Un mensaje de buenas noches para dormir y uno de buenos días al despertar
Las notas en su computador "Mi Hyung es el mejor", "la entrega del manuscrito es dentro de seis días llama a la mangaka", "Te espero el jueves en la cafetería a las 6:00"
Espera...¿el jueves?
¿Una cafetería?
¿Era eso una cita?
¿Saldría con alguien seis años menor que él?
Aunque nada de eso le importó cuando el jueves tomo su abrigo a las 4 y camino hasta la cafetería
Parando en un parque cercano porque si enserio era una cita, el que esperaría sería Minho...no él
Y aunque la nieve caía y sus manos se estaban congelando no se movió de allí
No hasta que vio al moreno entrar y contó diez minutos
Cuando estuvo frente al alto le sonrió viendo como éste se levantaba de inmediato
-Taemin...¿estás bien?-
Taemin lo miro curioso... él se sentía de maravilla
-Tienes la nariz roja, ¿Hace cuánto estás afuera?- Minho se acercó para poner su cálida mano sobre la frente de Taemin y el mayor se apoyó en su tacto porque enserio tenía frío, mucho frío- Dios, estás helado- y luego vino ese abrazo
Ese abrazo en el que Minho le saco el abrigo, dejándolo solo con esa camisa nada cálida y el menor abrió su abrigo para que el pudiera estar en contacto con su piel envolviéndolo entre su abrigo y sus brazos como si de un capullo se tratase
