Capítulo Único

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Muérdago

Tonks

Hoy era navidad, en Grimmauld Place todo estaba más que adornado, Sirius se había encargado de toda la decoración e incluso los las cabezas de elfo tenían un gorrito de Santa Claus.

- Tonks, ¿Me ayudas? Solo me falta la sala -dijo Sirius cargando una caja llena de adornos de Navidad.

- Esta bien tío -dije pasando a su lado para ir a la sala colocándole una diadema de reno.

- Muy graciosa -dijo entrecerrando los ojos- Por cierto -dijo tomando mi brazo- ¿Se lo darás hoy? -preguntó Sirius alzando las cejas con picardía.

- ¿Crees que sea buena idea ser rechazada en Navidad? Aun queda año nuevo -dije con sarcasmo.

- No seas tonta Tonks, él te corresponde -dijo Sirius.

- No lo hace Sirius, él me ve como una niña y no lo soy -le dije frustrada- Me llama pequeña -

- Vamos, solo es tierno. Además creo que ese es un bonito sobrenombre -dijo apretando mi nariz.

- ¿Enserio crees que me quiera? -le pregunté esperanzada.

- Sé que lo hace -dijo él sonriendo- ¿Y tú lo quieres, aún después de saber de su condición? -me preguntó creo que de manera protectora a su amigo.

- Yo lo amo y no me importa lo que sea, es lo más hermoso del mundo y lo más tierno que mis ojos han visto -dije sonriendo como boba al pensar en él.

- ¿Qué es lo más hermoso y tierno que has visto? -preguntó una voz entrando a la cocina. Volteé la vista esperando que no haya escuchado nada más que eso.

- Remus -dije sintiendo el sonrojo en mis mejillas e incluso en mi cabello.

- Tonks estaba hablando de t...-

- Un lobo -dije sin saber que era lo que decía.

- ¿Un lobo? -preguntó Remus no muy convencido.

- Es que vi un lobo aquí, ¡Digo! No aquí si no que en otro lado, bueno no en otro lado es que vi a un pequeño adorable e indefenso lobo en un bosque -balbuce tratando de decir algo coherente.

- ¿A sí? ¿Y cuando fue eso? -preguntó Remus curioso.

- Hace unos días -dije sin especificar nada.

- Entiendo -dijo el un tanto extrañado por mi anécdota, tal vez ni siquiera se lo creyó.

- Remus, ¿Por qué no ayudas a Tonks a decorar la sala? -dijo Sirius viéndome divertido.

- Claro, vamos -dijo Remus poniéndose de pie y saliendo de allí.

- Suerte -susurro Sirius subiendo las escaleras. Yo me apresuré a acomodar mi cabello y suspire tratando de calmarme.

- Remus -dije viendo como sacaba adornos de la caja. Remus se acercó a mi sonriendo.

- Empecemos o se nos hará tarde para la cena -dijo quitando un estorboso mechón de cabello de mi cara y pasándolo detrás de mi oreja

- S..si -dije o trate de decir. Empezamos a colgar arreglos y luces por la sala, hasta que se me ocurrió una idea.

- ¿Qué haces? -preguntó Remus viéndome divertido.

- Cuelgo muérdago -dije como si fuera obvio.

- ¿Y por qué enzima del sofá? - Preguntó al ver que el muérdago estaba colgándolo justo enzima del sofá.

- Hace frío, a nadie le gustaría dar un beso en el marco de la puerta -dije.

- ¿Y quienes se van a besar? -pregunto con una pequeña y adorable risa, lo mejor que mis oídos han escuchado.

- Ron y Hermione se gustan, se que se besarán -dije excusándome. No era mentira, ellos se gustan pero ninguno lo dice, lo que se es que no creo que se besen.

- ¿Lo sabes o lo sospechas? -preguntó cruzándose de brazos.

- Se puede ambas, ¿No? -dije bajando de donde estaba.

- ¿Por qué no lo colgaste en otra parte? -

- Haces muchas preguntas Lupin -dije intentando resistir la tentación de besar sus labios y callarlo de una vez.

- Mejor sigamos con esto -dijo sonriendo y volviendo a decorar.

Cuando terminamos fuimos directo a la cocina en donde ya estaban todos esperando a que Molly sirviera la cena. Me ofrecí para ayudarle pero se negó diciéndome dulcemente que no quería más platos rotos por el momento.

- ¿Lo hiciste? -me preguntó Sirius sentándose enfrente de mi.

- No -dije.

- ¡Merlín Tonks! ¿Cuándo lo harás? -preguntó algo cansado.

- Hoy -dije- Bueno, más bien lo hare en la madrugada -

- Pero que romántica -dijo sarcástico.

- ¿Te vas a burlar o vas a ayudarme? -le pregunté.

- ¿Qué piensa hacer tu alocada cabeza? -preguntó sonriendo. Le expliqué lo que deseaba hacer y le dije en que tenia que ayudarme.

- Solo eso -le dije.

- De acuerdo, haré lo que me pides pero con una condición -

- ¿Cuál? -pregunté curiosa.

- Si no le dices hoy lo que sientes se lo diré yo -dijo apuntándome con su dedo de manera amenazante. Yo asentí como niña buena y esperé.

Luego Sirius dijo que quería ir a la sala, se sentó en el sillón donde estaba el muérdago e invito a Remus y a mi a sentarnos justo en medio del muérdago. Sirius habló solo unos minutos.

- Estoy algo cansado ¿Saben? -dijo Sirius para dejarnos a Remus y a mi solos- Creo que me iré a dormir. Duerman tarde, feliz madrugada -dijo con picardía poniéndose de pie- Adiós -dijo despidiéndose de nosotros y después subir las escaleras.

- Hace algo de frío -dije recostándome en él. Se que lo sorprendí pero no tardé en sentir sus brazos rodeandome.

- ¿Quieres ir a dormir? -me preguntó sin dejar de abrazarme. Remus recostó su mentón en mi cabeza y ese pequeño acto me hizo tener el valor para decirle.

- No. Prefiero quedarme con lo más hermoso del mundo, lo más tierno que mis ojos han visto. Prefiero quedarme con el pequeño, adorable e indefenso lobito que esta aquí a mi lado abrazándome -dije abrazándolo más fuerte.

- ¿Lo sabes? -preguntó él susurrando.

- Y eso no cambia lo que siento por ti -dije levantando la vista para verlo a los ojos.

- ¿Lo que sientes por mi? -preguntó confundido, pero pude visualizar una pequeña chispa de brillo en sus ojos, yo sonreí y me acerque a él.

- Te amo -le dije sinceramente.

- Eres hermosa -dijo viéndome a los ojos- Y te amo -sonrió. Yo me acerque más a él intentando acortar la poca distancia. Sentí su aliento chocar en mis labios y sin esperar más lo bese. Sentí un sabor a chocolate del cual sé que me volveré adicta. Sus labios eran suaves y tibios, pequeños y tímidos y eso lo amaba.

Después de que el aire se nos acabara nos separamos, creo que de manera torpe pero no importa, yo lo amo.

- El muérdago no era para Ron y Hermione verdad -dijo acariciando mi mejilla.

- No lo se, averigualo -dije acercándome otra vez a él.

- Mi pequeña -dijo antes de besarme nuevamente.

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Feliz Navidad ♥

Muérdago (Remadora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora