-¿Y tú qué quieres ser de mayor?-
John dudó, veterinario, policía, bombero, todas le parecían buenas ideas, con 8 años estaba indeciso porque nunca pensaba en un futuro distante.
-Quiero ser explorador- exclamó en tono enérgico -seguir los mapas, buscar tesoros, ¡definitivamente ser explorador es lo mío!-
Era la mejor de las opciones se dijo, estaba decidido en encontrar a su perrito Tobby, su padre le dijo que había escapado de casa una tarde de otoño pero esa misma noche vió desde su ventana como este se lo llevaba al coche y oyó como su madre lloraba en la sala principal luego de que hubiese desaparecido, al levantarse pensó que fue una fea pesadilla y se fue a desayunar.
Pasó el tiempo y se transformó en John de 18 años que esperaba de pié ,mientras su familia lo miraba, a que la directora lo llamara y le entregara un diploma que le indicaba que ya podía ingresar a la universidad, al llegar su turno se acercó y una pregunta lo tomó por sorpresa
-¿y tú que quieres ser de mayor?-
Recordó que una vez había dicho explorador y como una tarde de otoño su padre había matado a su perro de una patada y él lo creyó extraviado, recordó a su madre llorar en el sofá y lo tensa que estaba hasta divorciarse, recordó como un día fue al velorio de ella que había sido golpeada hasta dejar de respirar, levantó la cabeza y vió a su familia, sus abuelos maternos lo aplaudían con entusiasmo, respiró profundo y posando para la foto dijo:
-De mayor quiero...-
