Yo nunca nunca

DIA 10 (parte 3)

Mimi y Ana suben al coche y se van al tanatorio de Tarragona, a 20 minutos de la mansión. Pasan el trayecto cantando, aunque casi no se dirigen la palabra. Aparcan.

MIMI: Ya hemos llegado.

Ana está a punto de abrir la puerta y Mimi le coge el brazo.

MIMI: Ana...

ANA: ¿Qué pasa?

MIMI: Quiero pedirte disculpas por el beso de ayer. Lo siento mucho, de verdad, y no quiero que nada cambie entre nosotras.

ANA: No tienes que pedirme perdón por eso. Pero tranquila, por mí parte está olvidado.

MIMI: Gracias.

Las dos bajan del coche y entran en el tanatorio. Solo entrar ven a Yadel, el novio de Ana, que va hacia ellas y saluda a Ana con un pico.

YADEL: (Mirando a Mimi) ¿Y ella quién es?

ANA: Mimi... ¿Enserio te mirabas las galas y el 24 horas?

YADEL: Claro que lo miraba mi vida. Pero es que joder, ¡cómo te cambia la fama!

MIMI: Si, he cambiado un poco des de qué salí de la academia.

YADEL: ¡Un poco dice! (los dos se ríen, aunque Mimi más por compromiso que por cualquier otra cosa). Oye Mimi, muchas gracias por ser tan buena amiga con Ana y cuidármela tanto.

MIMI: De nada.

PIENSA MIMI: Este tío me está empezando a rallar mucho. ¿Qué se piensa? ¿Qué Ana es de su propiedad?

PIENSA ANA: Mimi se está rallando bastante, no sé porque. ¿Será verdad que le gusto? Que va, no puede ser eso. Aun así, será mejor que Yadel y yo nos alejemos de ella para que no nos tenga que ver. A mí tampoco me apetece demasiado enchocharme con Yadel, pero voy a seguirle el rollo porque me debe haber echado de menos.

ANA: (A Yadel) ¿Dónde están mis padres?

YADEL: Creo que en aquel despacho, hablando con tus tíos.

ANA: ¿Vamos con ellos?

YADEL: Claro mi amor.

Yadel y Ana se dan un largo beso y entran en una sala cogidos de la mano. Mimi aprovecha que ya no la ven para irse al coche. En 45 minutos Ana entra en el coche.

ANA: Siento haberte hecho esperar... Cuando he visto que te habías ido he intentado venir, pero ahora que hacía tiempo que no me veía Yadel era como una paparra.

MIMI: Tranquila, no pasa nada.

ANA: ¿No estas enfadada?

MIMI: No.

ANA: Me alegro. ¿Eso quiere decir que mañana me acompañarás al entierro?

MIMI: ¿No puedes decirle a Yadel que te venga a buscar? Creo que le encantará...

ANA: Ya sé que él quiere venirme a buscar. Si de hecho, ahora quería venir conmigo a la mansión y he tenido que convencerlo para que no lo hiciera... Pero yo quiero que me lleves tú, y necesito que estés a mi lado en el entierro. Por favor.

MIMI: Cuenta conmigo.

ANA: ¡Muchas gracias! ¡Te quiero! (La abraza).

Mimi y Ana vuelven a la mansión. Al salir del coche Raoul va hacia ellas.

RAOUL: Mimi, ¿tienes un momento para hablar?

MIMI: Claro.

RAOUL: Vamos a la playa, no quiero que nos oigan.

Van andando hasta la playa y se sientan en unas rocas.

MIMI: ¿Qué pasa?

RAOUL: Nada, que después de cenar voy a proponer jugar a verdad o reto, y seguro que todos querrán. ¿Tú puedes retar a tu hermana a besarme? O si se te ocurre algo mejor también puedes decírselo, pero que incluya pasar tiempo conmigo. Por favor.

MIMI: Mireya me va a matar... Pero será divertido.

RAOUL: ¿Eso es un sí? (Mimi hace que si con la cabeza) ¡Muchísimas gracias, enserio! ¡Eres la mejor persona que he conocido! ¡Te quiero! (La abraza) Te debo una.

MIMI: Si ya ves, no me cuesta nada. ¿Volvemos?

RAOUL: Vale.

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Cepeda y Aitana van a la inauguración de una tienda de diseño, donde Aitana canta y todo les va muy bien. Volviendo paran en la carretera para liarse pero el padre de Aitana vuelve a llamar a Cepeda preguntando cómo ha ido todo, y porque aún no han vuelto.