Un trago de café y una gota de vino tinto

Pasos previos

"Café, el nombre de mi bebida favorita y el color de sus ojos. Café con una pinta de verde y el pétalo de un girasol dibujado en su iris. Si, un girasol, su flor favorita."

______

Aún en medio del caos de la ciudad, el tráfico y la política existen algunos atrevidos que se lanzan a ese abismo inmaterial en el que los sentidos son capaces de perderse a un nivel más profundo del que se podría llegar usando alucinógenos.

Era jueves en la mañana o tal vez era un martes, lo cierto es que el reloj marcaba las 6:37 am cuando a dos metros de distancia observé el familiar rostro de una chica con quien había tenido la oportunidad de cruzarme antes.

Inteligente, soñadora, con los pies en la tierra y sus metas en las estrellas. Esa era Vanessa, la chica del periódico universitario, la compañera de clase de mi room-mate. La dueña de los ojos de girasol y la portadora de aquellas curvas en las que cuatro meses después de aquel día perdería mi rumbo y tomaría un tren con destino al infinito.