ENTRE DOS MUNDOS

Prólogo

Siete años atrás...

Eran las 3 p.m. y Magnus, el gran brujo de Brooklyn, se encontraba esperando a su novio, el cazador de sombras, Alec Lightwood.

Lo que él sabía era que su pareja tenía una misión con su parabatai, se trataba de una cacería no tan peligrosa. Según le había indicado su novio en una llamada, iba a ir a una fábrica abandonada, pues unos demonios habían aparecido.

Transcurrido el tiempo que solía llevar a su cazador llegar, una espinilla en su corazón apareció, como si algo no estuviera bien. El brujo esperó un tiempo más, sabía que, la mayoría de veces, las cacerías tomaban más tiempo, sobre todo, si tenías a un parabatai Herondale.
Con la angustia encima, ya pasada la noche, decidió ir al instituto, creó un portal directo, no quería perder tiempo. Justo cuando se preparaba para ingresar al portal su celular sonó. Vio el identificador y se dio cuenta de que se trataba de su cuñada, sin dudarlo le contestó.

— ¿Hola? —El brujo solo escuchaba sollozos y palabras poco entendibles, pero lo poco que pudo entender, lo marcó para siempre.

—Lo siento...—pedía disculpas la cazadora con la voz rota—. Magnus se trata de...

—Isabelle, por favor, primero cálmate. No logro entender lo que dices.

—Es Alec, resultó herido y no resistió.

La última palabra se le quedó como eco en su cabeza. No podía creer eso, su amado cazador de ojos como el cielo, ya no estaba entre ellos. Su corazón dolía y dolía mucho, sentía que parte de su alma se había ido con Alexander, no aguanto más y se echó a llorar. Por todo el loft solo se podían escuchar sus gritos de dolor.

Siete años después...

La vida para todos desde que Alexander Lightwood se había ido, no fue nada sencilla.

El brujo había sido el más afectado y, por una extraña razón, se había vuelto más cercano al parabatai de su eterno amor, porque sí, aunque Alec había partido ya, el brujo lo seguía considerando el amor de su vida.

En esos siete años el círculo que siempre rodeó al cazador de sombras se volvió más unido. Un día de aquellos, cuando la mayoría ya sonreía, decidieron ir a un restaurante; Clary eligió ir a unas de esas calles mundanas donde se decía que vendían buena comida. Había convencido a Magnus, quien a regañadientes aceptó. Ya en el restaurante todos estaban listos para hacer su pedido, cuando el mesero se acercó a su mesa.

—Buenas noches, sean bienvenidos a "Tu Pasión". Me llamo Alec y seré el encargado de atenderlos.

Hola.

Bueno solo informar que esta historia corrección.

Hay nueva portada y esta hecha por la EditorialWolfCat , y su editora MaryCarso quien realizo este hermoso trabajo, de verdad muy bello trabajo.

Siguiendo con el hilo de la corrección será de manera lenta.

Muchas gracias por darse la oportunidad de leer la historia.