Capitulo 5

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El día había llegado, durante los 3 meses que había estado preparándose para escapar de casa e ir a San Francisco, ella se había comportado lo más normal y neutral que pudo.

Aunque por causa de su embarazo las nauseas matutinas estaban siempre presentes, alguna que otra vez su madre le había pillado en esa situación. Pero con ayuda de Matt había conseguido convencerla de que únicamente se trataba de efectos secundarios de las pastillas que ella había tomado, en verdad fue un alivio el ver que ella parecía estar conforme con la respuesta y no preguntara nada más respecto al tema.

Por otra parte, ella siguió actuando normal enfrente de los chicos, iba todos los días a la videollamada grupal de Lance para estar aunque sea un poco más de media hora allí, solo media hora porque no podía aguantar oír y ver como Lance y Allura contaban sus aventuras juntos, o se mostraban algún cariño. A pesar de que se había planteado olvidar al cubano por el bien de su bebe, todavía no podía superarlo del todo. Para su suerte ella había dejado de ir debido a que por poco la descubrieron

Flash Back

Era su décima semana de embarazo, es decir, 2 meses y medio aproximadamente. Debido a que Pidge era bastante flaca y pequeña su tripa se empezó a notar aun si ella se encontraba a la mitad de su primer trimestre de embarazo. Al notar aquello rápidamente acudió a la ayuda de su hermano, quien para ocultar el leve abultamiento que empieza a formarse en su vientre le dio unas sudaderas que incluso para el mismo Matt le quedaban grandes.

Nadie dije nada acerca del cambio de look de la castaña cuando empezó a utilizar la ropa de su hermano, era bastante común que ella tomara prestada la ropa de Matthew, nadie dudo en lo mas mínimo aquello.

El problema fue ocurrió un día cualquiera cuando todos se encontraba en el departamento de los paladines en una videollamda.

Todo estaba trascurriendo normal, como cualquier día hasta que empezaron los antojos de Pidge. Hunk aquel día había preparado casi un banquete entero, nadie supo la razón exacta por que el afroamericano hizo aquello, pero eso a Kaite no le importaba en lo absoluto. Cuando vio la comida en la mesa no dudo ni un segundo en lanzarse a comer, tanto era así que había pasado ya mas de 1 hora hablando con los dos morenos.

Oye Pidge, ¿no crees que estas comiendo demasiado?— dijo Lance desde la pantalla mientras veía como seguía comiendo

Nunca es suficiente — dijo simplemente, Hunk apoyo aquello

Si sigues así vas a seguir vomitando regaño Shiro

—¿Vomitando?— hablo preocupada Allura

El peli-blanco asintió con la cabeza —La madre de Pidge me a comentado que algunas veces la encontrado vomitando por la mañana — vio a la mencionada con ojos examinadores —¿Te encuentras bien?

Creo que mi madre también te habrá comentado que es debido a los efectos secundarios que me produjo las pastillas cuando estuve enferma —

Eso es lo extraño, ¿por qué después de tanto tiempo están empezaron tener esos efectos?— su mirada era desafiante, se levanto del sofá para poder imponer

Por si te olvidas Shiro ella también se levanto, a pesar de su baja estatura no permitió dejarse intimidar— estuve bastante días en cama, por lo tanto para poder reunirme con ustedes empecé a tomar unas pastillas  mas fuertes de las que anteriormente tomaba — desde cuando ella se volvió tan mentirosa, fue lo que pensó — veo que querer estar junto a mis amigos es algo malo — “mentirosa ”

Un pequeño secretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora