Oscura como la noche, la mente se cierne sobre su dueño, controla e inhibe sus primitivos instintos, se refugia en su mente y trata de escapar de la soledad,
corre desesperado hasta el final del pasillo puerta por puerta en busca de cualquier ser amigo o enemigo pues daba igual de que tratase ya que nada sería peor que terminar a solas con uno mismo y sus pensamientos más profundos y dejarlos fluir sin un mínimo de control ya que ellos lo mantienen sobre ti.
La noche junto a la luz de la luna deja entre ver nuestros pensamientos más profundos y ya sea consciente o manteniendo el sueño no hay posibilidad de evitar acabar recordando esos momentos pasados, acciones y no acciones que persiguen y torturan, de cansancio te atrapan y con paciencia te engullen.
Ese pensar que cambia mundos desde los cimientos, usando pequeñas hierbas habidas en este formando grandes cúmulos que terminan con la conocida montaña de un grano de arena, el creador e inicio de todo destruido por su propio hijo y sus hermanos.
Cambia a las personas y las vuelve contra el mundo, contra su gente y sus vidas, sus propios amigos y aquel amor, nadie se salva pues queda como marioneta a merced de ese pensar que derriba paredes con solo existir y penetra hasta el último universo de punta a punta con mera paciencia y nada más, crea por destruir y destruye por seguir creando y avanzando en su línea moviendo mundos hasta su fin, guiando como rebaño de ovejas ese tren hasta el inevitable final de las vías y su inevitable muerte por miedo a la creencia de un mal mayor como perro pastor.
Podemos seguir siendo marionetas y vivir por miedo, movernos por impulsos o instinto por esos pensamientos en frío o en caliente, da igual la situación, o empezar a pensar más haya y aprender a abrir los ojos al mundo que tenemos realmente.
Podemos avanzar como sociedad siendo conscientes de que pasa realmente y poder llevar control en nuestra vida sin ser sometidos con principios falsos implantados por una minoría que manipula los pensamientos mediante culturas falsas y ese adoctrinamiento camuflado.
