Capitulo V

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Capítulo Quinto:

El lobo, Parte II.









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— Entonces... ¿A dónde vamos? -preguntó Kurapika al notar que caminaban en círculos en la plaza del pueblo.

— Ni idea. -respondió el albino

El pelinegro alzó los hombros con una sonrisa, y el mayor negó con la cabeza. El rubio suspiró antes de detenerse.

— No puedo sólo perder el tiempo caminando en cir...

— En realidad -interrumpió Killua con un tono bajo pero decidido. Inmediatamente el moreno le miró.— No soy cazador, tampoco estoy aquí por diversión o algo así... -El rostro del albino se volvió en uno deprimido.

— ¿De qué hablas, Killua? -preguntó el  Caperuzo, mientras abría su boca en "o".

— Yo... Mi hermana está perdida, y había rumores de que estaba en este pueblo... Lo siento por... Haberles mentido, en especial a ti, Gon.

El grupo continuó en silencio, Killua tenía el rostro bajo, los mayores no
estaban seguros de cómo responder y el moreno procesaba la información. Finalmente, alzó los brazos llamando la atención de su amigo.

— ¿Y? ¿Has descubierto algo? -preguntó en el mismo tono de siempre.

— ¿Qué?

— Veniste a buscarla, ¿No? -sonrió animando un poco al ojiazul.

— Ya, pero ha estado perdiendo el tiempo con nosotros. -admitió Leorio uniéndose a la conversación finalmente.— ¡Maldición! Lo hubieras dicho desde el principio, chico. -regañó antes de dedicarle un sonrisa.

— Leorio tiene razón, no debiste haber perdido el tiempo así -suspiró el rubio.— Podemos ayudarte.

Killua estaba atónito, ¿Por qué ayudaban a un mentiroso? Terminó sin darle importancia, soltando una risa que desorientó a los demás.

— En verdad... Son raros, ¿No? -habló una vez sus carcajadas se detuvieron.

— Bueno, estás con nosotros, ¡Eso te vuelve un raro! -bromeó Gon, antes de abrazar al albuno que se sonrojó inmediatamente.

— Entonces -interrumpió el momento la rubia, como siempre.— ¿No tienes alguna pista útil?

— Oh, sí, eso... -Killua dió un empujoncito avergonzado al moreno antes de sacar el periódico.— Hace un rato, mientras estaba fuera de escena el repartidor volvió a pasar y le pregunté por el lugar mencionado aquí.

El chico señalaba una línea en un artículo de cocina, pero igual sólo Gon lo había notado y asumió que se equivocó de página.

— Y esa casa está hacía allá -señaló al sur de donde se encontraban.— Si quién creo que fue el responsable resulta cierto, Alluka debería estar bien... Por ahora. -admitió con una mueca de preocupación.

La Manzanita verde y El Cazador [Hunter x Hunter]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora