Sexy Brutale.[✓] Namjin‽ ¡TERMINADA!

Capítulo 21

Kim Seok Jin.

Terminó por ponerme el traje que preparo Jimin esta mañana antes de irse, mientras terminamos de vestirnos miro a mi costado a Yoongi que parece estar ocupado abrochando su camisa sentado en mi tocador, empezando a maquillar su rostro borrando los pequeños moretones y deshacerse de las vendas de su cuello mostrando una piel lechosa, me acerco a él asombrado al ver como aplica el maquillaje dándole ese aspecto aún más lindo, el termina por dejar una capa de bálsamo en sus labios dejándole un pequeño brillo.

-Se ve muy bien Yoongi... -Dice sorprendido dando aplausos al ver como deja una sonrisa negando.

-Te emocionas por cosas innecesarias Jin. –Dice el levantando del banco para tomarme y ser quien ahora tome asiento, él toma el cepillo del tocador para comenzar a cepillar mi cabello.- ¿Nunca habías visto a alguien maquillarse también?

-Mi madre, ella usar un labial rojo... También he logrado ver como algunas chicas usan maquillaje en sus rostro también las hacen ver algo lindas... Aunque nunca había visto que un hombre maquillarse.

El termina de cepillar mi cabello dejándolo suave como la última vez él se acerca a uno de los cajones dando pequeñas palmaditas con una esponja desapareciendo los moretones que dejo Jungkook la última vez. No dejo de sorprenderme como desapareció la marca de la mordida en pequeños toques, al dejar de dar esa capa de polvos continua delineando mis labios con un tono rosado dejándolo ver un poco más carnosos, al terminar lleva sus manos a la cintura orgulloso por su trabajo.

-Yoongi eres genial. –Me levanto sorprendido mirándome en el espejo.- N-No se ven las marcas, ni siquiera los moretones. ¿Yoongi?

Lo miro sacar de su abrigo un perfume dejando su fragancia en mi produciéndome toser sintiendo ese olor amargo al olerlo. El parece solamente reír de nuevo, guarda su perfume en su bolsillo, él se acerca mí para terminar de atar mi corbata negra, mientras lo hace un pequeño se escucha de nuevo en nuestra habitación.

- Escúchame, el casino le pertenece a Jimin, la mayoría de las almas vienen a apostar incluso sus vidas para ganar. –El termina de acomodar mi corbata empezando a doblar la camisa en el cuello.- Solamente se permite la entrada de demonios, también es rara vez tener que ver a almas de pecadores.

-¿Quieres decir que apuestas sus propias almas? –Preguntó aterrado a lo que Yoongi asiente.- -¿Pero cómo pagarían con su propia alma?

-Es simple, tienen que romper el contenedor y atrapar la alma que nace dentro de él. –Menciona el terminando de acomodar mi ropa para tomar asiento en el banco y cruzar las piernas.- Tal vez no lo sabias pero la manera monetaria que funciona nuestro mundo es en base de almas, tienes que ir primero a un banco de almas para registrarte y saber cuantas almas posees o quieras adquirir.

-Oh... Pero esas personas. –Muevo mis manos nerviosas al pensar como en simples apuestas pierden sus almas.

-Son almas idiotas que recurren a cumplir sus fantasías. –Completa el mirándome de brazos cruzados.- Solamente almas que creen que pueden ser los ganadores del premio mayor que ofrece el casino Park.

-¿Qué premio?

-Una entrada al cielo.