Tiempo.

6 1 0
                                    

¿Nunca han pensado recostados en su cama mirando hacia el techo, cuestionandose por todo?

Bueno, eso es lo que yo hacía ahora mismo, desviaba mi vista de a ratos hacia otros puntos en las maderas que decoraban.

Las preguntas caían como agua en una cascada, sin importar que tan alocadas fueran, yo las formulaba.

Me encuentro a un día de el año nuevo, aún no entiendo como el tiempo ya ha pasado tan rápido, cuanto ha pasado este, como he crecido, madurado sobre todo.

Uno mientras crece, cambia, envejece. Se da cuenta de millones de cosas a las cuales alguna vez prestó atención pero el tiempo, ese ser que todos conocemos pero nadie sabe cuidar, apreciar con delicadeza, al que jamás se le da la presicion necesaria, no ha querido dejarnos tomar un momento para darnos el placer de observar.

Aquellos quienes poseemos de toda nuestra plena salud en este momento, o punto culmine de nuestras vidas, somos quienes más deberíamos saber apreciarlo, admirar la belleza en el, como cambia y retuerce las cosas a su antojo y a los seres vivos igual, nos quita y da rasgos nuevos, elementos antes utilizables y ahora casi inservibles, sobre todas las cosas es a quien más debemos apreciar ¿Por qué? Porque al fin y al cabo, es quien se escabulle en el día a día, dando vivencias y regalando recuerdos, pero, se escapa de las manos en un pestañeo, como el agua de las manos. Se pierde como aguja en un pajar, un simple y pequeño grano de arena en el desierto.

Y lo peor de todo, nadie le da suficiente reconocimiento al llegar al final.

Si uno lo piensa, es muy caprichoso este fenómeno del que solo nosotros tenemos noción, cuando estamos en un momento como el mío, con la simple compañía de nuestro consciente. Nos damos cuenta como este capricho suyo por hacerse sentir más lento o veloz puede dar un giro drástico en nuestro día, podemos pasar de que los minutos se sientan como horas, a que las horas sean como segundos.

Un buen ejemplo de esto es en un sueño, un par de horas de sueño solo nos otorgan minutos de recuerdos proyectados del subconsciente, simplemente dicho, sueños.

El "tiempo".

Desde pequeña me ha parecido fascinante como muchas personas en el mismo lugar lo captan diferente, lo sienten más largo o corto, como anteriormente mencionaba. Como algunos lo aprecian y otros lo derrochan, como también hay quienes quieren acabar con este y quienes desean que sea eterno, vivir cada momento, o que se esfumen como humo en una ya usada colilla de cigarrillo y lentamente podamos observarlo alejarse y desaparecer.

Al fin y al cabo, si uno no aprende a amar al caprichoso del tiempo, se arrepiente en algún punto, puede que al final del trayecto, cuando tus utensilios y elementos ya no funcionen como quieres, caudno las cartas de los recuerdos son variadas, extensas y solo esperes el día en el que ya todos dejen sus funciones para descansar.

Ahí es cuando lo amas enserio.

Only thoughtsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora