50 dias OTP Todobaku/Bakutodo

Día diez: Besuqueos en la plaza.

Los festivales eran aburridos. Los festivales estivales que daban la bienvenida a la primavera y la mierda eran aún peores.

Miro el ridículo traje tendido sobre su cama. Definitivamente no se estaba poniendo eso.

No. No no no no y no.

Mataría a Toru algún día. Si lograba encontrarla claro, ella se había escabullido de él la última vez. Podría intimidarla lo suficiente para asustarla y entonces ella respiraría tan fuerte que la encontraría.

O podría pedirle a Shoto que congelara todo el piso hasta encontrarle, y adiós señorita-no-me-puedes-ver. Estaba seguro de poder convencerlo si jugaba lo suficientemente bien sus cartas…

—Bakugou —ese era Kirishima en la puerta. Que pronunciara su nombre era solo una advertencia, sin embargo, él no estaba pidiendo permiso para entrar realmente.

Bakugou miro el traje de nuevo y quiso darse de golpes contra algo, o hacerlo estallar. Eso realidad sonaba como una gran idea.

Escucho el suspiro del pelirrojo a sus espaldas.

—Deberías cambiarte pronto o llegaras tarde—dijo, Bakugou solo resoplo aun mirando con odio a… eso—. Es por una buena causa ¿Recuerdas? Caridad. Salva a la naturaleza.

Volteo y miro a Kirishima con odio, quien ni siquiera se inmuto un poco. Le daría eso. De cualquier forma, si por él fuera la maldita naturaleza podía irse al carajo si tan solo dependía de él poniéndose esa porquería rosa.

Kirishima en cambio estaba vestido y listo. Se miraba ridículo, completamente ridículo. Y estúpidamente cómodo y feliz en su patético atuendo.

—Tienes que hacerlo si quieres aprobar la clase de entrenamiento de héroes de All Might.

—Es una estupidez ¿Qué tiene que ver usar un estúpido disfraz ridículo en un estúpido y mediocre festival con ser un héroe?

Se veía como si Kirishima se fuera a echar a reír en cualquier momento.

Al final el solo se encogió de hombros. La sonrisa estaba ahí, sin embargo.

—All Might cree que es importante y el es nuestro profesor. Tenemos que hacerlo.

—Esa cosa es rosa. Como en el infierno la primavera trae mutantes conejos rosas. ¿no se supone que debería ser al menos café… o blanco? Pero ¿rosa?

—Duh. Es obvio que es porque eres el mejor amigo del hada de la primavera.

¿Por qué diablos el resto de la clase pensó que era una buena idea? Sinceramente incluso el café pervertido de Mineta sonaba como algo más soportable. ¿y porque diablos la escuela hacia un festival de primavera? Bakugou empezaba a cuestionarse que tan obsesionado estaba su director con los festivales.

Quizás era por las cosas que florecen y los animales esponjosos o lo que sea. Bakugou lo odiaba.

En cambio, Kirishima se veía radiante en su ridículo disfraz de girasol.

Iba a ser un día de mierda.

Al menos no tenía que hablar durante la estúpida obra. Jamás se había sentido tan aliviado de ser más que un extra en cualquier cosa antes, incluso si aún era el mejor amigo de la jodida hada de la primavera.

Dos horas, tres explosiones, un berrinche (negociación persistente lo llamaría Bakugou) y una pataleta después Katsuki Bakugou se encontraba enfundado en un adorable traje de conejo rosa. Un muy beligerante y gruñón conejo rosa.