Mi Hermosa Bruja

Malentendido

-Quien tiene las demás perlas?

-Lo ignoro.

Ella moría de ganas de hablar de lo ocurrido, pero no lo hizo, el Lord no sabía aún por qué ella causaba un efecto tan desagradable para él, y más por que no estaba preparado para ellos y no sabía cómo demostrarlos ni ganas tenía de hacerlo, se debatía entre frenar sus sentimientos o dejar que murieran por si solos, sin embargo la sola idea de alejarse de ella le causaba estragos en la boca del estómago, estando en el parque el tiempo parecía ir más rápido, al mirar para cualquier dirección se veía el atardecer, pero Sesshomaru solo veía a su hermosa bruja, y como el efecto del sol hacia que resaltará más su belleza, era tan exótica, lo tenía loco y excitado, ese aroma silvestre que se metía por cada poro de su ser despertaba sus más arraigados pensamientos, donde la devoraba con pasión encernadándose en una habitación por un largo tiempo, pero un chico alto, con barba y que se acercó demasiado rápido a Kagome lo saco de su ensoñación.

-Higurashi? Que gusto. Te ves... Realmente muy hermosa y diferente, por poco no te reconozco.

- Hojo? Woo hace tanto que no te veía, tú también te ves muy apuesto, el cambio te ha hecho bien.

Kagome solo se acercó más al joven para abrazarlo, y fue rápidamente correspondida, el ambiente rápidamente se llenó con el olor a excitación del chico, cosa que a Sesshomaru no le agrado para nada y enseguida halo a la miko a su lado, tomándola de forma muy posesiva al punto de encajar sus garras en su brazo, Kagome no daba crédito a lo que presenciaba un dolor molesto le indico debía terminar con el contacto entre ella y el Lord, pero no lo hizo, solo sintió un líquido recorrerle el brazo. Sesshomaru perdería el control si el chico seguía viendo así a Su bruja, sin quererlo la decisión estaba tomada, se quedaría con ella y la seguiría hasta el fin del mundo, no habría poder que los deparara, aún si ella no le correspondía.

-mmm... Hojo, te presento a Sesshomaru un amigo.

La palabra amigo, Sesshomaru no sabía que significaba muy bien pero no le gusto la cara de alegría que puso el humano, el lord pensaba que ese título no era el adecuado para él.

-mucho gusto.

El joven temblaba un poco al estirar su mano para saludar ya que la imponente mirada del Yokai lo hacía estremecerse, a Sesshomaru le agrado bastante tener ese efecto en él, e imito el acto, dirigiéndose a Kagome le dijo.

-Vámonos, es hora de comas algo

Y por si fuera poco, la tomó de las caderas y le dio un beso, uno cargado de energía que le erizo la piel a la chica, Hojo bastante incómodo se retiró sin ruido alguno, el beso terminó por falta de aire.

-Bruja, debes comer algo.

-Querido Lord el apetito de me ha quitado, pero aun debo comprar unas cosas para mi madre. Ademas, debo curarme, y cambiar de blusa ya que por tu culpa esta manchada de sangre, mamá se preocupara bastante si me ve así, Sabes que puedes regresar cuando quieras verdad?

-No me iré sin ti.

Kagome bajo la cabeza su fleco tapaba sus ojos y el aire se cargó olor a sal, estaba llorando, se debatía entre salir corriendo o enfrentar su problema, ya no era una niña, ahora era una mujer fuerte y decidida a enfrentar todo.

-Sabes, no deberías hacer esto, yo no soy ninguna de ellas, tu hermano se la pasó comprándome con alguien más un buen tiempo y me lastimo bastante, no dejaré que alguien más lo haga, no es tu responsabilidad cuidarme, te aseguro que ellas no te lo reprocharan y te liberan de todo. No es necesario que sigas con estas cosas. No deberías besar a diestra y siniestra si no sientes nada, nunca me gusto ser el juguete de nadie, y ahora que soy más fuerte no dejare que nadie me lastime de esa manera, puedes adelantarte, conoces el camino de regreso.

Pov Sesshomaru

De nuevo ese olor a sal, me desagrada, no combina con el de la canela, ¿Compararla? ¿De qué habla? Jamás me atrevería a hacer algo tan ruin como eso, ella es especial de tantas formas, que ninguna se parece ellas.

-Cree que la comparas, así como el mestizo lo hizo con la miko de barro, la haz lastimado. No tiene idea de que hecho latir nuestro corazón otra vez.

-Kagome, no hay punto de comparación entre ellas y tu.

-Lo sé, supongo que siempre hay gente mejor que yo, en muchas cosas.

Comenzó a caminar sin decir nada más, un extraño dolor se alojó en mi pecho, su caminar se veía triste, cansado, como si hubiera luchado contra mil demonios, algo común en mi época, pero ahora no lo había hecho, después de pasar por varios establecimientos, me di cuenta como se hacían las transacciones en este lugar, Kagome se cambió la blusa, tenía razón, aun no sanaba por completo, y no lo haría, mi veneno se incrusto muy profundo, soy un idiota, como no me di cuenta que la estaba lastimando de esa forma, Kagome no me miro en todo el trayecto a su casa, y el extraño dolor aumento un poco más.

"Buenas noches, gracias por leer, espero que les guste este capitulo, lo hice con amor par ustedes"