Medio tiempo - (Mi Amor En Juego) #2

Capítulo 5

Existen leyendas absurdas y otra un poco creíbles en cuanto a los días de cumpleaños (poner el anillo de matrimonio a través de la delgada vela que prenderán en el pastel, no apagar la vela soplandola porque desaparece el deseo), jamás  he sido supersticioso ni nada pero siendo honesto esas si son creíbles. Bueno según el tipo de persona.

-Emmanuel ¿ya te arreglaste? - gritó mi madre desde la sala.

-Ya casi termino - le contesté.

-Hay que tu mami - dijo Iris - se desespera ¿verdad? - preguntó

-Si y más con este tipo de cosas, no se porqué, si sólo es un día normal - le dije a ella.

-Pero cumpliras 19, no todos los días se cumplen 19. Es algo muy especial - comentó ella sentada en mi cama.

-Si pero...  No sé, no lo siento así. - dije mientras terminaba de atar mi corbata - Tal vez este año no sea el mío. - dije volteandome a ver a Iris.

- No digas eso - dijo muy seria - te han pasado cosas buenas y otras no tan buenas. Pero deberias tomar en cuenta que estás con las personas que te quieren demasiado. ¿Puedo decirte una cosa?

-Claro. - le contesté.

-Como quisiera que mis padres estuvieran juntos, o bueno,  al menos que mi madre estuviera aquí. Para que pueda conocer al mejor novio del mundo.

-Y no olvides una cosa...

-¿Cuál? - preguntó ella.

-El mejor padre de todos. - dije tocando su vientre ya crecido.

Ella sólo me miró con ternura. Se inclinó un poco para darme un beso, pero pareciera que mi madre nos espía cada vez que estamos juntos porque en ese instante nos interrumpió entrando a la habitación.
Erick y Adam me cargaron (como siempre lo hacen) para poder bajar a la sala. Iris trataba de bajar la silla pero pude notar en su rostro un pequeño ceño fruncido al cargarla.

-Déjame ayudarte querida - dijo mi madre tomando la silla a la mitad de los escalones. - No puedes cargar cosas tan pesadas hija. - añadió.

- No señora. Yo puedo.

-Iris, por favor. - le dije.

-Esta bien - contestó algo exhausta.

-Muy bien,  en lo que acomodan a Emma yo iré por el pastel - dijo Melanie.

Ya ha mejorado mucho, esa plática motivacional con Iris le sirvió demasiado. Ya no hemos sabido más sobre Hazael desde hace varios meses. Ni si quiera una palabra sobre él en el colegio.
Vaya que la valentía no le duró mucho tiempo como él decía.

-Feliz cumpleaños a tí, feliz cumpleaños a tí...

Comenzaron a cantar todos mientras Melanie salía de la cocina con un pastel mediano en las manos con un par de velas en forma del número 19 encendidas. Se me hizo un nudo en la garganta, ya que hasta la fecha y desde que tengo memoria, es la primera vez que festejo mi cumpleaños de una forma tranquila, sin tener que cuidar a ebrios o peor, ser yo a quien tenían que cuidar.

-Feliz cumpleaños querido Emmanuel, feliz cumpleaños a tí...

-Pide un deseo hermanito - dijo Adam cuando acercaron un poco el pastel hacia a mí.

Miré durante un par de largos segundos la vela pensando en que pedir. Tratando de no desperdiciar ese deseo tan especial.

Ya estaba listo, respiré muy ondo para por fin apagar la vela cuando antes de hacerlo sonó el timbre.

Melanie abrió la puerta y de inmediato una voz muy conocida dijo...

-Happy Birthday Sweetheart...

Me quedé asombrado al ver que mi tía Mía por fin había regresado. Nadie sabía en que partes de la nación o hasta del mundo había estado. Uno de mis deseos se había cumplido y sin tener que pedirlo. Miré nuevamente la vela y la apagué rápidamente.