Todo iba tan pero tan bien en nuestra relación, con problemas como cualquier otra pareja, Finn era un poco explosivo y yo un poco controlador pero no había nada que no pudiéramos resolver juntos.
Nos veíamos cada tercer día para ir a comer, platicar, al cine, pasear, hacer cualquier cosa juntos.
Algo cambió de pronto en nuestra historia, el simplemente dejo de hablar, llamar, contestar, me entere que había decidido decirle a sus padres que era gay por lo cual ellos no lo aceptaron y fue cuando comprendieron porque yo Edward siempre iba a su casa, y que no era simplemente un amigo, le prohibieron verme, no entendía por qué Finn solo no me lo dijo si él sabía que esto lo podríamos resolver juntos, nunca logre coincidir con él.
Aquella tarde después de un mes me topé con sus padres supongo que me buscaban y las únicas palabras que me dijeron fue – Mira jovencito la homosexualidad o gay, o como sea que le llamen ustedes al estar un hombre con otro, no existe, el hombre nació para la mujer y la mujer para el hombre, así que no te acerques a nuestro hijo, él no es como tú, él debe estar bien y casarse con una mujer, salir con una mujer-. Trate de convencerles, hablar con ellos pero simplemente mi lucha fue inútil solo me dejaron hablando, gritando y suplicando que nos amábamos, que deberíamos estar juntos y no en estas condiciones.
Paso otro mes y yo no sabía nada de Finn, todos los días le mandaba mensajes, cartas, y nada de nada.
Mi dolor era profundo, mi alma estaba destrozada, ya no sabía que más hacer cada día que pasa era más difícil, mis amigos siempre estaban ahí apoyándome, consolándome, pero no podía hacer nada.
Seis meses después acepte mi realidad, acepte mi dolor, acepte todo de todo, y de pronto recibí una llamada de él, rápidamente conteste el celular, pero solo escuchaba su respiración, agitada, y escuchaba como lloraba, mientras yo le decía que hablara conmigo él no me decía absolutamente nada, de pronto solo me dijo – perdóname – y sin más colgó.
Trate de buscar más sobre él, y lo único que pude saber es que él no estaba ya en la ciudad, se había ido, sin mí, ¿por qué él se iría sin mí?, ¿por qué él no me dijo que buscáramos una vida juntos en otro lugar? ¿Porque esto me estaba pasando a mí?, nada tenía sentido, absolutamente nada.
Cumpliendo ya 10 meses sin él, mi mejor amigo me llamo y solo me dijo que necesitaba hablar conmigo, de pronto recibí un mensaje de una amiga diciéndome que yo necesitaba saber algo, entonces me saque de onda porque todos mis amigos y amigas de pronto tenían que decirme algo, lo único que me decían era que Finn había llegado hace 2 días a la ciudad pero que algo había ocurrido, y entonces me dijeron que fuera al Hotel Lamoon de la ciudad, les dije que iría inmediatamente, que solo me dieran un momento, sin más nada colgué.
Yo me aliste me emocione, grite, salte, llore de la emoción, no lo podía creer él me estaba esperando con los brazos abiertos, esperándome a mi después de unos largos meses, me sentía vivo y feliz nuevamente.
Llegue al Hotel Lamoon había unas patrullas, había mucha gente y yo solo me detuve y por mi mente cruzo lo peor, pero eso no podía pasar Finn me estaba esperando, así que corrí y de pronto vi a los papás de Finn, después a mis amigos y todos corrieron a mí y me detuvieron, entonces comprendí que efectivamente había pasado lo peor.
Todo había pasado tan rápido, el reporte policiaco decía que habían encontrado el cuerpo de Finn sin vida en la habitación 20, la causa, suicido con un impacto de bala calibre 20 en la parte occipital de la cabeza eso fue todo.
Mi dolor fue tan grande yo solo quería morir, estar con él, abrazarlo, sentirlo, besarlo, por una última vez. Miles de preguntas pasaron por mi cabeza, no lograba comprender por qué había llegado hasta el suicidio.
Al día siguiente lo velaron yo no podía acercarme sus padres no lo permitirían, mis lágrimas las entregaba solitariamente desde unas cuantas calles de la funeraria, mi último adiós lejos de su cuerpo, no quise que nadie estuviera conmigo, quería estar solo yo, de pronto alguien se acercó y me entregó una carta en mis manos y sin decir nada se alejó.
Querido y amado Edward:
Las cosas no salieron como esperaba, todo se salió de control cada día que paso sin estar junto a ti, sentir tu calor me mata lentamente, intente contarles a mis padres, bueno si lo hice, les dije que soy gay y que te amo como a nadie amare, por un momento creí en mis padres, en que nos apoyarían, que sabrían que su hijo es plenamente feliz con alguien y ese alguien, tu Edward, de pronto se pusieron como locos, me quitaron todo mi celular, mi laptop, y me encerraron en mi propio cuarto, ¿Qué tipo de padres hacen eso con su hijo? ¿Qué tipo de padres no permiten la felicidad de su hijo?
Bueno para no hacer más triste nuestra historia no te pude buscar, no te pude escribir, no pude hacer nada para que tu estuvieras junto a mí, me amenazaron con que te harían daño a ti, que lo que hacíamos estaba mal, que no existía tal amor, de pronto un día escuche que salieron de casa, y puede abrir la puerta de mi cuarto, quebré la ventana de la sala y salí corriendo, corrí tan rápido y tan lejos como pude, de pronto una persona me pudo llevar a las afueras de la ciudad, muy lejos de casa, llevaba una tarjeta que había escondido en caso de una emergencia en mi cuarto, contaba con bastante dinero así que era lo de menos, por meses no sabía qué hacer, a veces comía y otras no, solo dormía pensando en que hacer para poder estar contigo, pero sabía que mis padres cumplirían con su palabra de hacerte daño, y el día que te llamé solo no podía parar de llorar, había escuchado tu voz, y lo único que pude decirte fue perdóname, y colgué porque ya no pude resistir más.
Hace dos días llegue, me arme de valor para regresar por ti, pero sabía que no podríamos ser felices juntos, me estoy consumiendo, mi dolor es tan grande de no poder tenerte, abrazarte, amarte, besarte...
Te escribo con lágrimas en los ojos y sabiendo que hare algo que tu no me vas a perdonar, tal vez sea egoísta pero si mi felicidad no es contigo, que rayos hago aquí.
Perdóname por hacer esto solo quería que tú supieras que paso y que te amo, que nadie más que tu tiene mi corazón, adiós mi querido amor Edward, hasta vernos luego.
Te ama por siempre y hasta el final Finn,
Sé que nunca me olvidaras.
Grite como loco mi corazón estaba desgarrado, le hable a mi mejor amigo, le conté todo, le pedí que esta carta la entregara a la policía en ese instante, y me dirigí a la funeraria, entre, y el padre de Finn me saco a empujones, mientras yo le gritaba que había sido culpa de ellos el suicidio, todo se puso muy mal, se alteró más y solo me dijo que el culpable era yo, que yo le había hecho esto a Finn con mi homosexualidad, me defendí y empezaron los golpes de pronto saco un arma y solo disparo, caí al suelo y ya no supe más de mí.
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Todo iba tan bien, pero tan bien en nuestra historia.
RomanceLa historia de Finn y Edward te atraparan por completo, surgirán múltiples preguntas, una relación como todas pero nada tenia sentido hasta la llegada de aquella carta. La impotencia siempre presente.