Nuestra mejor canción - Oneshot

Nuestra mejor cancion

Para mi amiga invisible, Mariló.

Espero que lo disfrutes muchisimo, te quiero.

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Respira hondo mirando al cielo y sonríe mirando al público, aún no puede creerse que toda esta gente quiera y pague por escucharle cantar muerde su labio inferior y les mira a todos.

Suspira levemente y mira hacia un lateral del escenario, donde un pequeño rubio de metro y medio le esperaba para empezar la canción, esa maldita canción.

Cierra los ojos y mira al suelo, al sonar el primer acorde no puede evitar recordar todas las veces que habían cantado está canción, pero especialmente la última

Unos días atrás...

-Joder, Raoul- Susurró jadeante y le miró. Miro como el pequeño rubio subía a gatas hasta llegar a el miembro del moreno, cual miraba con deseo, como si de una chuche se tratara.

Acarició sus muslos y los besó, con dulzura y deseo, mucho deseo. Subió la mirada hasta poder mirar a Agoney y solo con esa imagen Raoul sintió que podría correrse ahí mismo. El canario le miraba, con la mirada más lujuriosa que le había mandado jamás, pidiéndole, suplicándole que lo hiciera ya, pero Raoul no quería. El catalán quería hacerle sufrir un poco por lo que bajó lentamente la cabeza hacia su miembro para empezar a jugar con el.

A Agoney esa imagen le estaba matando. Sentir el cálido aliento del rubio sobre su erecto miembro; sus fríos dedos dando suaves, casi imperceptibles caricias por toda su extensión; la forma en la que le miraba; todo eso era más de lo que Agoney podía aguantar. Llevó una de sus manos a la cabeza del menor, metiendo los dedos entre su pelo para tironear de él en el momento que Raoul dejó un suave beso sobre su glande.

-Joder...- Soltó el moreno en un jadeo. Y Raoul volvió a dejar otro beso, y otro, y otro, cada vez más húmedos.-Dios...- Volvió a jadear Agoney soltando todo el aire que tenía en sus pulmones, el cual no tardó en recuperar cuando Raoul comenzó a lamer, haciendo círculos sobre su glande.

Agoney volvió a tirar de su pelo soltando un leve gemido echando la cabeza hacia atrás. -R-Raoul.- Gimoteó, y al nombrado no le hizo falta nada más para acabar con el sufrimiento de ambos y comenzó a lamer, para después metérselo en la boca de una vez.

Volvió a tirar del pelo del rubio, esta vez un poco más fuerte, y el catalán lo notó, y aceleró el ritmo agarrando el pene de Agoney por la base para empezar a masturbarle al mismo tiempo que chupaba. En ese momento Agoney gimió, gemido que rebotó en todas las paredes de la habitación.

-M-me voy a correr- gimió Agoney. Ante este comentario Raoul subió más el ritmo de la mamada mientras apretaba la mano con la que le hacía la paja, y ahí Agoney explotó. Raoul se lo tragó todo y con delicadeza lamió las gotas que resbalaban por el pene del canario.

Dejó un beso en la parte baja de su abdomen y subió hasta quedar al lado de Agoney, quien se apresuró a besarle, saboreando los labios del contrario ahora salados por su semen.

Cuando se separaron, se miraron y se sonrieron.

-Entonces vas a meter la canción?- Preguntó Raoul acariciando la mejilla del otro

-Si me prometes que va a acabar igual por supuesto.

Ambos rieron por el comentario del moreno y se fundieron en un nuevo beso, del cual no tardaron mucho en separarse. Apagaron la luz y se fueron a dormir, tan pegados que quizás a la mañana siguiente aparecían siendo solo una persona.