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Era una mañana tranquila, bueno, algo asi, ya que en una recidencia -un tanto alejada del centro de la ciudad- se podian escuchar un horrible alboroto, insultos lanzados por toda la casa, cosas callendose y una que otra amenaza de muerte.

-¡ven aqui escuincle baboso!- grito la joven mujer mientras perseguia a su hijo por toda la casa.

-¡no ire a una estupida escuela, yo quiero dormir!- contesto de la misma manera encerrandose rapidamente en su habitación

Esa era la unica razón en esos momentos, 'la escuela', la causante de todo ese alboroto tan temprano, cualquiera que escuchase el escandalo pensaria que: "estan peleando de una manera muy brusca" o "que la famila habia adoptado animales, los cuales peleaban en estos momentos", pero esas ideas eran erroneas ya que todo ese escandalo mañanero era provocado por un niño de tan solo 4 años y una mujer de 23.

Los golpes a la puerta cesaron-era probocados por la mujer- dejando al pequeño tranquilo, el no queria hasistir a una escuela en donde veria niños llorando, otros comiendo cualquier cosa entre pegamento, papel, mocos; de tan solo pensarlo le causaba repugnancia hasta mas no poder y peor tener de amigo a un niño asi, nisiquiera se detenia a refleccionar, era un rotundo ¡no!.
Pero su calma, se esfumo al sentir una mano jalarlo del pie sacandolo a arrastras de debajo de su cama, llevandose con si un susto muy grande, la madre tan solo se hecho a reir cargando al pequeño como costal de papas.

Pocos minutos pasaron, y ya el pequeño se encontraba mas cabreado que nunca con el uniforme puesto y con su pequeña mochila en su espalda dispuesto a irse con la furia alta, la madre del pequeño lo tomo en brazos y lo llevo hasta el auto, lo acomodo en el, subio y marcho rumbo a la escuela para dejar a su pequeño ahi, con la idea de tener paz tan solo 6hrs ya era una bendición para ella. Al llegar, tal y como se lo esperaba, tuvo em contratiempo a la hora de bajar al niño del auto, el que ahora se hallaba aferrado al asiento para niños, soltando gritos de negacion y uno que otro insulto hacia su progenitora.

—Katsuki Bakugou, suelta el asiento!!!— luchaba con todas sus fuerzas
—¡¡Noooo!!— se aferraba mas a la silla, pero no contaba con la estrategia que planeaba su madre, que para el, era muy despiadada
—Si no lo haces, olvidate de la figura de acción de All Might— menciono tranaquilamente, sabiendo que su hijo no se resistiria a eso
—No me importa— pero no contaba con que le saldria el tiro por la culata, y lo ultimo que le quedo pos hacer fueron las cosquillas cosa que funciono bastante logrando sacarlo de auto

Tan solo unos segundos de haber logrado sacarlo de ahi y la mujer subio al auto rapidamente arrancando como si no hubiese un mañana, gritando desde la ventana un : 'vendre por ti mas tarde' y con eso desaparecio rapidamente sin dejar rastro alguno.
Su semblante se volvio serio hasta se podria decir que parecia furia, y murmurando miles de cosas entre al lugar que se encontraba lleno de pequeños niños, unos riendo, otros jugando y uno que otro conversando o hasta llorando, le fascinaba el ruido, pero no este tipo de ruido esto era una tortura para sus oidos, pero decios darle una mini oportunidad a eso, espero unos momentos semtado en una banca hasta que el sonido de una campana retumbo sus oidos, todos los niños detuvieron los que estaban haciendo y comenzaron a seguir a las mujeres adultas que salieron derrepente para poder ordenarlos y decir las respectivas secciones de cada niño.

—Pongan atencion niños!!!— grito una mujer frente a los niños captando la atención de los presentes —yo soy Milena, encargada principal de los pequeños que van al preescolar, al lado mio se encuentra la maestra Shizuka ella esta encargada de los niños de 4 y 5 años asi que los que posean esa edad siganla—

Dicho eso mucho de los niños comenzaron a seguir a la profesora entre ellos el pequeño Katsuki que seguia con la mirada abajo trantando se tranquilizarse, al llegar a la sección correspondiente cada niño tomo asiento en su respectivo lugar, alegremente la maestra se sento frente a todos

Por mi cuentaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora