All I want is everything *COMPLETA*

El primer encuentro

¡Feliz año nuevo! Y he aquí el segundo capítulo, espero les guste mucho. Creo que tarde un poco en actualizar pero siempre surgen miles de cosas y no me puedo sentar en paz a escribir... aunque también a veces hace falta la inspiración.

¡Y claro! Quiero agradecer por los comentarios y las votaciones del primer capítulo.

Lleguen hasta el final del capítulo que dibuje algo para este fic!!!

________________________________________________________________________________

Protocolos, etiquetas y roles era lo que regían el día en día a una sociedad sin equidad, donde existían tres clasificaciones que dictaban todo: el segundo género. Los cuales guiaban todos los aspectos de la vida como: lo económico, los roles, las posibilidades de desarrollo, posición social... en fin, decidía toda la vida.

Sobra decir que los Alfas se encontraban el a punta de la pirámide con las mejores posibilidades que el mundo podía ofrecer. En segundo lugar se encontraban los Betas, que se podían definir con un ciudadano promedio, no destacan en general pero no tenían limitaciones sociales. Y por debajo de todos se encontraban los Omegas, la última clase, que solo podían aspirar a ser madres, perfectos esposos y un accesorio para los Alfas.

En resumen los Omegas eran las damiselas en peligro que necesitaban a un héroe en su historia, y eran preparados en academias especiales para ser los perfectos hombre o mujeres en desgracia que eran rescatados por un fuerte Alfa... ¡Cliché en pleno siglo XXI!

Mientras crecía me di cuenta de la basura que era la sociedad pero no me importó, a los 13 años yo había tomado una decisión, yo podía ser un Alfa, un Beta o un Omega, eso no me importaba ya que tenía la determinación de llegar a la cima y cumplir mi sueño.

Sobra decir que mientras todos los Omegas se encontraban en mood "A thousand years" yo me encontraba en "IDGAF", no es que no creyera en el amor, solo que mi idea no era encontrar en el un héroe, ya que yo soy totalmente capaz de ser mi propio héroe.

Esto me había traído un sin fin de obstáculos pero a estas alturas yo podía reírme los problemas ¿El precio? Pocos amigos, pero eran los necesario y sinceros como Chris; una complicada situación en el amor, ya que los a los Alfas no les gustaban Omegas que no fueran sumisos pero las experiencias que habían tenido habían valido totalmente la pena; y contaba con un sequito propio de haters, formado por Alfas, Omegas y Betas.

Pero no me importaba en lo más mínimo, yo vivía mi vida al máximo y como quería. La sociedad podía dictar mil cosas, gritarme si quería pero no la seguiría.

Así que ese día me levanté con el mejor ánimo del mundo, estaba en una competencia de nivel mundial y no dejaría que un par de Alfas que tenían todo al alcance de sus manos pasaran sobre mí. Me preparé para ir a la pista, tomé mi maleta y baje por las escaleras al piso de Chris, que se encontraba dos plantas abajo.

Llamé a la puerta repetidamente, ya que era seguro que mi rubio amigo seguía en la cama. Después de un par de minutos Chris me abrió la puerta con una cara de pocos amigos, dio media vuelta y se internó de nuevo en la habitación, yo sonreí mientras lo seguía.

- Espero que tengas una buena excusa para estar tan temprano en mi puerta- me dijo entrando al baño.

- ¿Temprano? Son las nueve de la mañana, es hora de ir a la pista.

- ¡Viktor, podemos ir más tarde! La pista no irá a ningún lado, tenemos dos días hasta que la competencia inicie- me dijo el suizo de mal humor.

- Sabes que no me gusta calentar con todos ahí, reducen el espacio y estorban- le dije acercándome al baño y recargándome en el marco de la puerta mientras mi amigo se cepillaba los dientes.