Mark miraba fijamente el cuerpo prácticamente sin vida de su viejo amor.
Habían pasado casi dos años desde el accidente que dejó en coma a Jackson y aquella era la primera vez que pensaba que sería mejor desconectarlo y que todos pudieran seguir con sus vidas.
Cada año firmaba un contrato en el hospital que le permitía a Jackson tener una habitación individual, cuidados especiales, visitas programadas y mantenerse con vida de manera artificial.
De alguna forma, el verlo ahí acostado significaba que su historia aún no concluía y él aún planeaba cosas que decirle o hacer en cuánto despertara. Durante casi dos años, aquella había sido su rutina. Iba cada tercer día a limpiar la habitación, cambiar las flores, hablar con los médicos acerca de los nulos registros de movimiento y se dedicaba a pensar cosas para decirle si en ese preciso momento despertara el chico postrado en la cama.
Pero no sucedía.
Nunca iba a suceder.
Guardó cuidadosamente la pila de papeles que le dió el médico a cargo del caso y se decidió por volver a casa.
No dejaba de pensar en cómo sería la vida sin Jackson y reía casi automáticamente ante aquél pensamiento.
Lo único diferente sería que ya no tendría que ir al hospital. Aunque quisiera pensar lo contrario, el chico ya no estaba con ellos. Era su necedad y egoísmo la que mantenía al pobre muchacho de 25 años en aquél mundo, obligándolo a luchar por su vida cuando él posiblemente rogaba porque lo dejaran descansar desde hace ya bastante tiempo.
Al volver al departamento que solían compartir, la historia no era muy diferente. Se había empeñado en conservar todas sus cosas tal y como el muchacho las había dejado.
Generalmente no se detenía mucho a pensar en cómo estaba viviendo su vida, sin embargo, considerar el desconectar a Jackson y dejarlo descansar en paz lo hacían sopesar todas las cosas positivas y negativas del asunto.
Si lo ponía en una balanza quizá lo único malo sería el sentimiento de culpa que se instalaría en su corazón al poder mantenerlo con vida y aún así elegir acabar con ella porque todo le estaba resultando muy pesado y sin sentido respecto a su vida actual. Del lado positivo podría colocar el seguir adelante, desechar todas sus cosas, dar por terminada la relación, llevar una vida más tranquila, buscar un empleo de tiempo completo, abandonar todos los pensamientos que tenga de incertidumbre, y lo más importante, poder hacer la vida que soñaba con Jinyoung.
Sonrió.
La forma en la que se habían conocido había sido lo menos romántica posible, pero aún así él se había metido en su corazón haciéndolo sentir culpable por quererlo cuando su novio estaba en coma.
Si bien, Jackson no había sido el mejor novio del mundo, no se podía quejar de los años que había pasado a su lado.
Volvió en sí y notó que el departamento estaba completamente silencioso, lo cual significaba que su novio no había despertado aún.
Dejó sus cosas en la sala de estar y se dirigió de inmediato al dormitorio con una sonrisa grabada en el rostro.—No quiero levantarme. —Escuchó aquellas palabras ahogadas en la almohada en cuanto había dejado caer medio cuerpo sobre el suyo. —Ayer trabajé hasta tarde en el club y siento que muero.
—Espero que no hayas hecho algo indebido. —Mordió con suavidad su oreja para que despertase.
—Si es indebido servir bebidas en un club para poder comprar un anillo de compromiso de 4 salarios mínimos, entonces hice muchas cosas indebidas ayer. —Se dio vuelta y atrapó a Mark entre sus brazos para obligarlo a recostarse con él.
—Era broma lo de los salarios mínimos. —Sonrió. —De cualquier forma me casaré contigo.
Jinyoung se incorporó de golpe. No sabía qué decir. Nunca había hecho una propuesta formal y de alguna forma ambos tenían planes para comprometerse.
—¿Es una broma? —El mayor negó, aún recostado en la cama. La sonrisa en su rostro nunca se desvaneció. —¿Y Jackson?
Mark debía admitir que aquello le encantaba del menor. A pesar de que era de conocimiento casi público que no le gustaba que las cosas de la ex pareja de su novio siguieran en su casa, siempre se había mostrado comprensivo y amoroso cuando surgía alguna situación respecto a eso.
—He pensado no renovar el contrato con el hospital... —Se detuvo. Aquello sonó bastante cruel. Se oía pésimo saliendo de sus labios aún cuando pensaba que era la mejor decisión.
—¿Estás seguro?
—Estoy seguro de que no quiero más esta vida... Quiero estar contigo, volver a la universidad o conseguir un empleo de tiempo completo, quiero seguir adelante. Disfrutar al máximo de estar contigo sin sentir que estoy siendo infiel.
—Él te fue infiel a ti...
—Si, pero yo me enamoré de ti sabiendo que él está inconsciente y no tengo opción de contarle que ahora estoy contigo. Sólo... —Suspiró. —Quiero dejar de sentir a Jackson como una carga.
—O sea que...
—Si, es un acto egoísta, pero estoy cansado de esto, de sentir que estoy equivocándome contigo porque estoy atado a él.
—¿Cuánto tiempo queda?
—Una semana solamente...
—Llamaré a los chicos.
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[MarkJinSon] Before I met you
FanfictionJackson abre los ojos totalmente seguro de que su vida sigue siendo la misma. El hecho de haber estado en coma durante dos años lo golpea sin previo aviso, ¿qué pasará cuando sepa que su novio, el que jura es el amor de su vida, ahora está saliendo...