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Finn's pov

El grito de mi madre me despertó para un nuevo día de escuela. me desperecé y caminé hasta el baño para despojarme de mi ropa. alcé la mirada encontrándome con mi reflejo, me detuve a observarme un momento.

Mis rizos negros estaban completamente despeinados, caían por mi rostro cubriéndome los ojos, los cuales, estaban entrecerrados debido al sueño que tenía a esas horas de la mañana. Tenía los labios secos, odiaba esa sensación. Pasé mi lengua por estos humedeciéndolos un poco haciendo que brillasen por la luz del sol que comenzaba a alzarse en el cielo que aún conservaba algunas estrellas.

Seguí bajando la mirada por mi cuerpo hasta toparme con mi abdomen, que estaba bastante marcado. Ni me había dado cuenta de que tenía abdominales. Le sonreí a mi reflejo y me metí en la ducha sintiéndome un egocéntrico.

Al salir, me puse un boxer negro y cubrí mis piernas con un holgado pantalón azul muy oscuro con una camisa blanca de manga corta que se ajustaba a mi cuerpo. Cogí una camisa a cuadros roja y negra y me la puse abierta remango las mangas hasta los codos.

Estaba buscando mi chaqueta de cuero por todas partes, no la encontraba y no tenía ni idea de donde podría estar.

Bajé a desayunar encontrándome a mi madre.

-Hola cielo- me echó una mirada y se acercó mi con un gesto de desaprovación.-No debes salir con el pelo mojado, vas a enfermar.
- Mamá, estamos a 20 de mayo, te aseguro que no voy a enfermar por salir así. - Dije tomándola por los hombros con cariño.
- Por cierto- mencioné mientras me sentaba en la mesa. - has visto mi chaqueta de cuero?
Ella miró hacia arriba frunciendo el ceño, lo hacía siempre para pensar y lo encontraba gracioso.
-No, no la he visto- respondió finalmente para darle un trago a su café.
-Qué tal con las clases de francés? - preguntó - No me has contado nada de nada.
-Bien-respondí con simpleza mordiendo una tostada.
-Solo bien? - volvió a preguntar intentando sacarme información - Quién es tu tutor?.
- Noah Schnapp-respondí como si mi madre lo conociese.
-Hijo, especifica que me estás poniendo nerviosa. - respondió alzando su dedo índice como amenaza. A lo que yo solté una carcajada.
- Es un chico que va dos cursos por debajo que yo, pero es muy bueno en francés y muy dulce y amable. - respondí sonriendo.
-Y como es físicamente? - preguntó alzando las cejas.
- Es bajito de piel suave y lechosa, tiene el cabello castaño lacio y algunos mechones caen por su frente. Tiene los ojos grandes y verdes con unas pestañas largas preciosas y su sonrisa es...dios, es hermosísima, hace que se ilumine una sala entera.
-Uuuuuuuuh-canturreó mi madre.
- Qué? - respondí actuando como si lo que dijese hace unos segundos fuese como decir la lista de la compra.
- A ti te gusta ese tal Noah, te gusta mucho. - afirmó poniendo una sonrisa pícara en su rostro.
-No.
- No? Cómo describirías a Wyatt? - cuestionó.
- Bueeeno pues es un tipo alto, con el pelo rizo y castaño claro, casi rubio, los ojos miel y con un buen sentido del humor.
- Ves? Así describes a alguien que no te gusta. - razonó mi madre.
-Ay ma-suspiré- es que es muy lindo. - dije desplomándome sobre la mesa.

Mi madre rió dulcemente y acarició mu cabello.
-Tienes que invitarlo a casa.
- Mañana viene a darme clases.
- Y no me avisas! - chilló mi madre escandalizada. - Mira como está esta casa, así no se puede traer a nadie!

Alcé la mirada viendo todo ordenado e impecable a excepción de dos platos sucios en el fregadero.
La miré con una cara como diciendo "es enserio" y ella solo terminó su café.
- Mira la hora! - exclamó- Venga vete que ya es tarde!

[...]

Llegué a la escuela y vi a Carla dibujando en su blog, me acerqué a mirar.
- Qué dibujas? - pregunté haciendo que ella se sobresaltase al no verme llegar.
- Eres tonto? Llegas y saludas. No llegas en plan ninja y me asustas.
- Ahg vale. - respondí sentandome a su lado en la banca.
- Dibujo a la perra de Millie Bobby Brown muerta.
- Madre mía que agresividad por las mañanas. Quién es?
- No sabes quién es? - preguntó incrédula. - Es el intento de Regina George del instituto. Va por ahí con su panda de estúpidas sin personalidad creyéndose superior a los demás. - respondió concentrada en su dibujo. El cual me abrumó al ser tan realista.

Al cabo de un rato llegaron Ariana y Noah. El segundo llevaba algo que me llamó la atención. Portaba mi chaqueta, la que tanto estaba buscando, le quedaba grande, las mangas le cubrían las manos haciéndolo ver muy tierno.

En cuanto se aproximó le sonreí ampliamente pero antes de poderle decir nada dijo:
- Siento llevar tu chaqueta es que no tenía nada más que ponerme, ahora te la devuelvo- se excucó haciendo el amago de quitarse la chaqueta.
- No- lo detuve tomándolo por los hombros.- tranquilo, quédatela tú, se ve mejor en ti.
Él me miró sorprendido pero su expresión cambió por una cálida sonrisa .
- Gracias, Finnie.- dijo para ponerse de puntillas y besar mi mejilla extremadamente cerca de la comisura de mis labios.
- Awwww- exclamó Carla- sois tan lindos juntos, tengo que haceros un dibujo.



[...]

Las horas pasaron rápidamente y ya me encontraba con Noah en el aula de francés dando el "pasé composé" o algo extraño.

- Nous avons été mauvais- pronunció con lentitud acariciando las palabras con sus suaves labios.

Miraba como su pequeña boca se movía hablando en aquel idioma tan extraño para mi.
- Finn- mi nombre sonaba mejor que nunca- puedes dejar de mirarme los labios y traducir la frase?- dijo casi riendo.

Me sonrojé violentamente al ser descubierto.
- N-nosotros...?- pronuncié inseguro leyendo la frase que él había escrito con su bolígrafo morado.
- Sí, continúa- dijo dándome a entender que iba por camino correcto.
- Nosotros hemos...- él asintió- ido?
- No, lee bien- corrigió señalando la palabla con la punta de su bolígrafo.
- No puedo, no sé.

El castaño se acercó más a mi y lentamente depositó un beso en mi mejilla haciéndome sentir sus aterciopelados labios contra mi piel que tomó color al instante.
- Lee con calma- susurró con su dulce voz liviana.

Me concentré en leer de nuevo toda la frase poniendo en contexto el verbo.
- Nosotros hemos sido...malos?

Se formó un silencio que tensó cada músculo de mi cuerpo. Noah solo me miraba sin ninguna expresión lo que me ponía más nervioso.

- Est- me interrumpió abrazándome por el cuello poniendo mi cabeza contra su pecho mientras enredaba sus finos dedos en mis rizos.
- Sí!- exclamó feliz haciéndome reír mientras lo abrazaba fuertemente por la espalda.

Repartió incontables besos por mi cabello y frente haciéndome reír más.

- Eres todo un monsieur français- dijo separándose del abrazo.- es increíble cómo estás progresando.
- Es todo gracias a ti, precioso.- dije acariciando su mejilla con las yemas de mis dedos hasta llegar al mentón.

Se inclinó y en un movimiento rápido besó castamente mis labios, a penas fue un roce, pero bastó para hacer que las mariposas volasen en mi estómago.



Pasó una hora de estudio y decidimos salir del instituto. Nuestros caminos se iban a separar cuando se me ocurrió algo.
- Te invito a tomar un helado.

Me miró algo sorprendido pero tardó segundos en sonreír con dulzura haciendo que sus preciosos ojos oliva se rasgasen ligeramente y sus pómulos tomasen un rubor rosado. Sencillamente hermoso.
- Por supuesto, podemos ir a una heladería estupenda que conozco.

Dijo tomándome del brazo emocionado entrelazando sus dedos con los míos.
- Por qué eres tan tierno?- cuestioné retóricamente comenzando a caminar junto a él.
- No sé, por qué eres tan lindo conmigo?
- Porque me gustas.












Bum suspense!
Siento estar tan inactiva pero es que no sacaba tiempo para escribir y prefiero escribir poco, bien, y que os guste. Que escribir mucho, mal y que sea una mierda.
Un besote:
-Lu💛

Cours de français ; Foah {AU}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora