Ruthless [ EDITANDO ]

Capítulo 81

Kate

Despierto por la luz colándose por mi ventana, toco el otro extremo de la cama y esta frio, Alex debe haberse ido a trabajar temprano a la empresa.

Levanto mi trasero de la cómoda cama y camino directo al baño, al entrar me despojo de mi ropa y tomo una ducha.

(...)
Al terminar me higienizo y salgo de la habitación colocándome mi bata de doctora.

Oh cierto casi se me pasaba, ya han pasado siete años desde que tuve esa maravillosa navidad con Alex y mi familia.

Actualmente él tiene 26 años y tiene a su mando la empresa de su padre, y yo tengo 25 años y hace unos meses me gradué como doctora pueden creerlo.

Hace siete años que vivimos juntos bajo el mismo techo y actualmente hace unas semanas nos mudamos nuevamente a Seattle donde están nuestras familias, ya que en todos estos años estuvimos viviendo en Boston por mi carrera y la universidad. Estos años fueron muy difíciles ya que Alex viajaba mucho por negocios de la empresa y lo entiendo ya que confió plenamente en él, y sé que no me engañaría.

Al llegar a la sala me saca de mis pensamientos un ruido proveniente de la cocina.

¿Qué está pasando?

Alex está trabajando, y se supone que estoy sola en la casa.

Tomo el bate de beisbol de Alex favorito que está en el sofá y camino sigilosamente por el pasillo hasta la cocina, al llegar me escondo tras la pared y cuando escucho pasos acercándose lanzo el bate contra alguna parte del cuerpo del ladrón.

Veo hacia el que esta tirado en el piso y logro divisar que es Alex.

-¡Oh por dios! Alex –Digo acuclillándome a su lado.

-Buena puntería cariño –Dice tomando su paquete.

-Lo siento tanto, pensé que era un ladrón porque... ¿Tu no deberías estar trabajando?

-Quise tomarme el día para estar con mi prometida, cariño ¿podríamos dejar esta conversación para más tarde, y podrías traerme algo de hielo? –Dice rápidamente.

-Oh si claro –Digo levantándome y caminando hasta el refri.

-Creo que nunca tendremos hijos linda –Dice riendo.

-Lo siento –Digo también riendo.

-No te preocupes, ahora sé que sabrás defenderte si hay un ladrón en casa.

-Necesitare un bate –Digo tomándolo del piso.

-¿Y cómo vas con los preparativos? –Dice levantándose del piso y caminando hasta la sala para sentarse en el sofá.

-Genial, solo faltan pequeños detalles y algo que es un poco importante –Digo sentándome a su lado.

-¿Qué podría ser tan importante que aún no lo tengas? –Pregunta.

-Mi vestido –Digo rápidamente.

-Todo te queda hermoso, lo encontraras muy rápido.

-Gracias.

(...)
Luego de esa pequeña platica desayunamos algo que preparo Alex antes de que lo golpeara y él se despide de mí ya que lo llamaron para una junta a último minuto.

Subo las escaleras hasta mi habitación y tomo mi celular que esta sobre la cama.

Llamada Telefónica

-Hola Kate –Dice Rubí del otro lado de la línea.

-Hola Rubí, iré a ver mi vestido de boda en una hora ¿quieres venir?

-Siempre espere este momento, claro que quiero ir –Dice en un tono emocionado.

-Genial, te espero en casa se puntual.

-Si nos vemos.

Fin de la llamada Telefónica

Luego de hablar con Rubí, llame a mamá, Bella y la madre de Alex. Día de chicas, no tengo idea del vestido que quiero y me vendría muy bien opiniones de mi familia.

Camino hasta mi armario saliendo de mis pensamientos, tomo una camisa a cuadros rojo y negro, unos jeans, unas botas con algo de tacón y mi bolso.

Salgo de la habitación y bajo las escaleras rápidamente ya que están tocando el timbre de entrada de la casa.

Al llegar a la puerta la abro y veo a Riley la madre de Alex frente a mí.

-Hola Riley pase, siéntase como en su casa –Digo sonriendo.

-Hola Kate, muchas gracias –Dice caminando detrás de mí hasta la sala.

-¿Cómo ha estado?

-Muy bien gracias ¿y tú como te preparas para el mejor día de tu vida? –Dice en un tono emocionado.

-Muy bien, algo nerviosa, pero tengo a mi familia para ayudarme en todo lo que necesite –Digo tomando su mano cariñosamente.

-Me alegro que me consideres como tu familia.

-Riley en unos días seremos familia, y la iremos expandiendo cada vez más.

-¿Piensan tener hijos? –Pregunta.

-No lo sé, no hablamos mucho del tema, Alex viaja mucho y un bebe necesita la atención de ambos, y yo acabo de comenzar con mi carrera.

-Mi niña, son jóvenes tienen mucho tiempo para pensar si quieren ser padres o no.

Le sonrió dando por acabada la conversación y me levantó del sofá para caminar hasta la puerta de entrada y ver a toda mi familia en ella.

-¡Bueno que comience el día! –Digo emocionada tomando mi bolso sobre la mesa.