Capítulo único

249 30 22
                                    


Intenta olvidar aquella relación del pasado, esa que terminó hace tanto tiempo pero que lo lastimó tan profundamente que ahora las marcas dejadas eran irreversibles tanto dentro como por fuera.

Marcas que jamás se borrarían.

Aunque tratara de dejar esa parte de su vida atrás o muy bien guardada en lo más profundo de su ser, la sombra de esa relación lo seguía como un eterno recordatorio de que no fue lo suficientemente bueno como para hacerla funcionar, para hacerlo quedarse y, a pesar de que ya lo había superado (o eso intentaba creer), todavía sentía que no era competente para nadie. 

Aquel pesar le hacía tan difícil poder continuar, cada día era un suplicio de sobrellevar, reír y bromear para que sus amigos no preguntaran sobre su estado y evitar traer recuerdos de sucesos que solo quería olvidar. No tenía intención de dar a conocer el cómo se sentía porque no era necesario cargar a los demás con problemas irrelevantes, problemas que simplemente cubriría con una sonrisa falsa y que dejaría escurrir después en gotas rojas, oscuras y dolorosas en la soledad de su tienda.

Guardando silencio.

Para no preocupar a nadie.

Para no molestar a nadie.

Sin embargo, en alguna parte en su corazón necesitaba a alguien que lo hiciera sentir... importante, no quería caer ante las palabras cálidas provenientes de aquel rostro carente de emoción porque debían ser falsedades. Ese sujeto solo quería ser amable porque era consciente de que era un hombre patético que causaba lástima en los demás. El deportista no lo conocía, ya que si lo hiciera no se comportaría tan gentilmente con alguien como él, quien trató lo mejor que pudo para ser lo suficientemente bueno para esa persona que terminó marchándose de todos modos.

Así que le sonríe detrás de su máscara a las mentiras dichas para alejarse antes de que descubra sus verdaderos sentimientos.

Antes de que le siguiera mintiendo con palabras dulces.

Él se fue hace tanto tiempo y pese a que dijera que lo había superado, todavía dolía, las cicatrices lo hacían también recordándole que se había ido, pero estaba bien, porque no podía obligarlo a quedarse. 

El rojo sigue brotando y no puede culpar a nadie más que así mismo por no ser mejor.

Coloca su fachada nuevamente porque no hay nada que pueda hacer. Tenía sus recuerdos y se conformaba con ellos. Era suficiente, podía continuar con eso.

Un mentiroso, en eso se había convertido,

Por él.

Un tonto.

Las mentiras siguen brotando de esos labios que insisten en que vea a alguien que no es, no puede ver a esa persona porque no sería real, no sería el verdadero Zacharie, la máscara que tiene ahora es su verdadero yo, no tiene que descubrir a otra persona porque solo son él y su fracaso. Pero ese hombre no quiere ver eso y sigue insistiendo, tratando de darle valor a su persona. Siempre llegando a su tienda a hablar y a confundirlo. Pablo alguna vez le comentó que le gustaba a aquel sujeto, a Batter, pero no podía creerle porque nadie podía tener algún tipo de sentimiento de amor si no era Damien, él era el único que podía amarlo y eso el otro no lo entendía.


****

Amigo, es 2019  y sigo jodiendo con este juego sin poder hacer borrón y cuenta nueva. 

(Redacté muy mal y lo siento, pero quería publicar algo por mi aun existente amor a OFF)

¿Quién era Damien? Como dijo un Elsen en la estación de Pentel, las paradas del tranvía fueron nombradas como las personas importantes del pasado. Basado en eso, le di un papel a Damien. 

Ojalá se hubiera profundizado el tema...


A Fool - [OFF Game]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora