¹New Blood - TVD【✔】Terminada

❀ Capítulo 38

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ALKEMI: UNA SEGUNDA SOMBRA MÁS OSCURA

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Estaba en la mansión de Klaus con mis hermanos. Estaba tensa Silas entró a la mente de Klaus y supo de nuestro hermano Kol.

Manipuló a otras personas e hicieron que le sacaran la daga. Ahora Kol estaba ahí afuera molesto.

—Vamos, Kol. Contéstame el maldito teléfono...—le dejé un mensaje de voz en su buzón de su telefonó.

Era llamada número diez.

Mire a Rebekah y despues Elijah. Ambos estaban molestos con nosotros por lo de Silas y la cura.

—Como es posible, que haya pasado esto—Digo molesta, estaba preocupada por mi hermano.

—Silas es peligroso y ustedes creyeron que podían evitarlo. —los acusó Klaus.

—Él ya tiene la cura gracias a ustedes, ahora falta que hagan que se levanten los muertos. —nos regaña—Es increíble cómo llegaron los dos hacernos esto. Yo creí que Mikela era diferente, pero resulto ser igualita a ti.

Se me escapó una risa descarada.

—¿Enserio hermanita? Tú encaprichaste por esa maldita cura.    Te hice un favor, eso no es para ti.

—Aruinaron mi felicidad —me saca en cara—. Finges ser buena, pero en realidad eres mala. Siempre finges, incluso cuando decías no estar enamorada de Klaus.

—Oye, respeta soy tú hermana mayor...—le recordé que era la mayor.

—Pues no pareces. Nunca has actuado como la hermana mayor. Eres falsa, patética y te acostaste con Stefan Salvatore para vengarte de Klaus y de mí...—le di una bofetada.

Elijah se puso en medio de las dos.

—Elijah quítate, ya me cansó Rebekah. Quiere una buena paliza...—le dije molesta y Klaus me tomó del brazo.

—Ambas están enojadas, mejor dejamos esto...—No pudo terminar de hablar porque Rebekah le rompió el cuello.

Klaus miró a Rebekah y luego a mí. Ambas estábamos de un humor oscuro tan peligroso. No sabía quién le rompería el cuello. Ya que no queríamos que nadie se metiera en nuestra pelea.

La que lo hizo fui yo, usando magia.

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Unas horas después...

Klaus y Elijah seguían en el suelo hasta que alguien abrió la puerta principal y luego se cerró. Se escucharon pasos por toda la casa y llego hacia donde estaban los dos originales.

Era Kol Mikaelson quien llegó a la mansión. Observó todo el lugar estaba como si hubiera pasado un huracán, pero había manchas de sangre.

Kol bebió de su botella un poco y con su pie comenzó a mover a sus hermanos. Hasta que el primero en despertar fue Elijah seguido de Klaus. Ambos se exaltaron a ver el lugar.

—Tiempo que no castigo a nadie...—susurró Elijah molesto, porque le rompieron el cuello y Klaus no dijo nada. También estaba furioso.

Ambos miraron a Kol, que seguía tomando.

—¿Dónde demonios estabas? —Preguntó Klaus a su hermano menor.

—Alimentándome y después de conseguir un teléfono nuevo. Encontré varias llamadas de Mikela así que vine. —Dijo Kol, por muy raro que pareciera. Estaba calmado. —Ella no es nada linda enojada, es la reina de los demonios. Me dejó con una daga por una semana por matar a su tierno y noble novio licántropo. —Soltó una risita—Al parecer no le gusta que le mantén a sus novios. ¿Y qué les paso?