Together (Clexa) [PAUSADA]

4

(El encuentro de Lexa con sus tías fue programado para ese mismo fin de semana.
Nadie quería que pasara, Abby y Marcus parecían preocupados. Bellamy estaba furioso, Octavia estaba bastante confundida y también un poco enojada, yo por otro lado solo estaba triste.)

Viernes en la tarde.

-Tendremos que saltarnos la pijamada de hoy.- sonó tan decepcionada como yo me sentía.

Nuestras pijamadas eran un ritual, todos los viernes, sin falta. Las haciamos desde que teniamos 10. Empezaron porque un día Raven vino a dormir junto con otras amigas, vimos películas, comimos dulces y dormimos en el piso. Al día siguiente cuando se fueron Lexa se acercó con una sonrisa como siempre y comenzó a hacer mil preguntas con respuestas que para mi eran obvias.

-¿Nunca has hecho o ido una pijamada? - pregunté un poco sorprendida.

-No.– confesó. – El señor Marcus no me deja dormir en otras casas.

-Pero puedes dormir en otra pieza.– Sonreí.

Mi loca mente de niña acababa de tener una idea que marcaría una tradición en nuestras vidas. El viernes siguiente Lexa se mudó a mi cuarto con todas sus mantas, hicimos dos camas en el suelo, comimos de la pizza que habian pedido para la cena y vimos caricaturas.

Y así, desde entonces cada viernes nos quedábamos a dormir en una de las piezas, cuando Octavia creció comenzamos a invitarla de vez en cuando para no dejarla fuera pero lo cierto es que era algo nuestro. Hasta hoy, hasta que sus tías irrumpieran en nuestra rutina.

-No es como que tuviéramos opción.- dije estirándome en su cama.

-Bueno, no es como si me fuera para siempre.– replicó.– Por ahora...

-Ni siquiera digas eso.– la regañé sentandome en la cama.– No irás a ninguna parte.

-Bueno, la verdad, si, estoy llendo hoy mismo.

Ambas nos miramos con tristeza. No quería que se fuera, pero sabía lo mucho que quería a sus tías y que esto sería bueno para ella.
A pesar de que sabía que solo serían dos noches se sentía como si se fuera por un año. Jamás, desde el día de la mudanza, habiamos hecho algo o ido a algún lugar sin la otra.

-Este va a ser un fin de semana muy aburrido.– me quejé dejandome caer en la cama otra vez.– Promete que me vas a enviar mensajes todo el tiempo.

-Claro que si.– sonrió guardando su teléfono.

Lexa se acomodó la mochila en la espalda y me sonrió melancolica. Me puse de pie, le di un fuerte abrazo y bajamos las escaleras. Junto a la puerta estaba el resto de la familia. Como siempre, cuando los veia a los cuatro juntos me preguntaba, ¿para que me quería Abby aquí ? Con Marcus y los hermanos era suficiente, ahí estaba la familia...
Alejé esos pensamientos para concentrarme en la chica junto a mi.

-Te voy a extrañar, Alexa.- se despidió Abby.

Marcus parecía acongojado y se limitó a decirle que la esperaría en el auto. Bellamy le dio un abrazo y Octavia se aferró a ella como si la vida se le fuese en ello. Yo solo le sonreí un poco antes de que desapareciera por la puerta.

Cuando vimos el auto alejarse y cerramos la puerta la casa quedó en un silencio extraño. Abby nos informó que iría a hacer la cena, cada uno se fue a su habitación.

Me tiré en mi cama y saqué el cuaderno de dibujos, no sabía muy bien que dibujar así que simplemente me puse a revisar lo que ya habia dibujado. En general había muchos paisajes, en especial del colegió, los salones con chicos aburridos, el gimnasio, el comedor. También había dibujos de la familia, un retrato donde solo estaban Abby, Marcus, Bell y O, habia varios dibujos de Octavia pues a mi me gustaba dibujarla y a ella ser dibujada. Repasé el ultimo que tenia de Lexa, en el que se veía triste en la detención. Es como si ella lo hubiera sabido, sabia que algo malo pasaría... Pero, ¿esto era malo?