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"El elogio del productor principal es suficiente para hacerme realmente feliz", y se supone que así debía serlo, pero decirse así mismo que lo era, solo sería engañarse, tal vez debió de perder toda posibilidad de ganar cuando Yoonbin dijo que no había esperanza para ellos. Después de todo competían contra chicos populares.

Sus pensamientos estaban divididos en dos, por un lado sabía que aquellos "chicos populares" no lo eran de la nada, todo tenía un porque y solo es debido al talento que Seunghun y Byounggon tenían. Ambos estuvieron un promedio de tres años en aquella empresa, y no siquiera él mismo podía imaginar lo difícil que es estar en yg por tanto tiempo.

Por otro lado también estaba aquel pensamiento que no lo dejaba en paz, así como Seunghun y Byounggon merecían ganar, también Yoonbin y él, ambos habían recibido el elogio del CEO, ¿Por qué no fue eso suficiente para hacerlos ganar? Acaso se debía a que las fans sólo querían que debute el tesoro A, o solo se guiaron por el visual y no por el talento, no negaba que Seunghun tenía una gran voz y la forma en la que realizó los altos junto al rap de Byounggon fue espectacular, pera la química no fue tan buena como en la canción que el y Yoonbin realizaron, sus voces estaban hechas para ser escuchadas al mismo tiempo, aparte de que ambos transmitieron todos sus sentimientos, de seguro Yoonbin se arrepentiría por haberlo escogido.

Claramente ese día todo cambió y más para su amistad recién formada, a pesar de solo conocer al mayor cinco meses, comparado con el tiempo que conoció al resto, sintió un gran apego hacia él, siempre se veía tan callado e inmerso en sus pensamientos. Con el sentimiento de que Yoonbin aún no entablaba una amistad con los de su equipo, hizo lo posible por acercarse a este, sabía que sus esfuerzos daban gritos cuando el mayor ya no buscaba alejarse y a pesar de no decir nada se mantenía a su lado, el silencio era una palabra que definía a Yoonbin y aunque Yeongue fuera todo lo contrario, bastaba una sonrisita de este para que le aceptarán cualquier cosa, lamentablemente las cosas ya no son así.

Si bien solo habían pasado dos días desde que Yeongue dejó de hablarle o dirigirle la mirada, veía y sentía como cada vez se alejaba más, el pequeño no estaba intentando llamar su atención como solía hacerlo todo el tiempo, suponía que era por lo que había pasado en el programa, pensó que debía darle su espacio pero olvidó lo sensible que solía ser este y lo mucho que se cuestionaba a si mismo, alguien como él podía soportar esto solo pero Yeongue no.

Yeongue solía ser tan lindo y frágil, era muy adorable y desbordaba alegría todo el tiempo, hasta puede jurar que le hace sentir esas estúpidas mariposas de las cuales hablan las chicas bobas todo el tiempo.

A pesar de esto aún tenían que verse todo el tiempo, por ejemplo, hoy tienen que grabar para el siguiente episodio, todos se encontraban sentados frente a aquellos casilleros en los que minutos antes habían tenido que dejar una polaroid, indicando con quién querían formar equipo.

Todos esperaban a que Byounggon y Hyunsuk los escogiera para su equipo, a pesar de que uno de sus deseos era quedar en el equipo de Byounggon también era del poder compartir equipo con Yeongue, lastimosamente todo se derrumbó cuando escucho el nombre del menor salir de los labios de Hyunsuk.

A pesar de no quedar en el mismo equipo, ver a Yeongue sonreír con sus nuevos compañeros de equipo, hizo a su corazón sentirse cálido, pues significaba que estaba mejor o eso quería creer.

–Tierno~ nuestro Yeongue es muy tierno– Hyunsuk estaba fastidiando al menor y aunque este parecía tomarlo a juego y seguía regalándole aquella sonrisa tan caracteristica de él, pues al que más molestaba era a Yoonbin mismo, odiaba sentirse tan desesperado por algún rastro de atención por parte suya, este era tan delicado y bonito que sabía que atraía fácil atención y de solo pensar que tal vez Hyunsuk había puesto sus ojos en el menor lo hacía rabiar de celos.

Luego de aquella escena junto a Hyunsuk no pudo esperar más, una vez que acabaron de grabar, corrió hacia el menor y lo acorraló contra la pared, con ambos brazos al lado de su cuerpo, evitando que se fuera. No podía mentir y menos si se trataba de lo bien que se sentía tener a Yeongue tan nervioso bajo sus brazos, nadie dijo ni sospecho nada hacia la acción contraria puesto que era normal verlos así de cerca aunque casi siempre Yeongue iba a buscarlo.
–Tenemos que hablar– fue lo único que dijo con aquella mirada tan fría que lo caracterizaba, en aquella posición pudo ver con detenimiento como las mejillas del menor se colorean cada vez más.

–Yeongue-ah, ¿Por qué tienes que llegar tan lejos?, ¿Acaso fui malo contigo?– Acunó su rostro entre ambas manos buscando que le dirigiera la mirada, –Pense..que estarías molesto conmigo, por mi culpa perdimos..–  Hubo un silencio corto en el cual Yoonbin no pudo evitar reír con cierta ironía, ellos debieron haber ganado, hasta el CEO elogió la voz del menor y aún así este seguía sintiendo que había hecho algo mal.

–Sabes que no es cierto, fuimos uno de los mejores equipos, tú eres un gran cantante..Yeongue, no deberías dudar de eso, si hubiéramos escogido otra carta y hubiera sido la del CEO, habríamos ganado y sería, solo gracias a ti–  Yeongue no pudo evitar sentirse tan conmovido, su hyung que no solía ser muy afectuoso estaba ahí junto a él, acariciando sus mejillas con tanto cariño mientras le decía que no tenía la culpa de nada. Podía pensar que se lo decía por pena, pero lo sintió tan sincero...sus palabras quedaron ahogadas cuando sintió los brazos de Yoonbin envolver su cuerpo, su lindo hyung y crush con el pasar de los días lo estaba abrazando y tratándolo como lo más preciado del mundo.

–Disculpen que interrumpa pero Yoonbin, necesito que dejes a Yeongue para poder entrenar– Hyunsuk comentó desde la puerta de aquella sala de grabación, el tiempo valía oro y más si tenían una presentación dentro de poco.

Yoonbin rodó los ojos sin que su hyung lo viera, aparte se encontraba de espaldas a este, –Seguiremos más tarde, ¿Está bien?– Dirigió su mirada hacia Yeongue sin tomar en cuenta la presencia del mayor, acarició sus mejillas una vez más antes de dejar un beso en sus labios y marcharse.

Después de aquella tarde Yeongue cometió algunos errores en la coreografía pero aún así logro seguir adelante, seguía pensando en lo bien que se sentían los labios del mayor en sus labios, moría por que acabará el ensayo, y una vez este acabo salió corriendo evitando las preguntas que Hyunsuk le tendría respecto al beso, corrió y busco al mayor en su habitación, tocó el timbre y espero hasta que el mayor saliera.

Cuando fue a buscar a Yoonbin no tenía planeado que decirle, pero si había pensando en pedirle una explicación, ¿Por qué lo hizo?, ¿Qué significaba?, ¿Qué pasaría con su "amistad"?, tantas cosas rondaban por su mente. Cuando abrieron la puerta y estaba apunto de hablar otra vez todo se derrumbó cuando Yoonbin lo jalo del brazo haciéndolo pasar, escuchó como cerraban la puerta de golpe tras suyo y volteó a observarlo. Este se encontraba con unos bermudas y sin camiseta, al parecer había tomado una ducha, su marcado abdomen estaba todo mojado y las gotas caían desde su rostro hasta su cuerpo.

–Hy-hyung yo...necesito..¿Por qué?, b-beso– Yeongue era un manojo de nervios y ver al mayor así no lo dejaba articular palabra alguna, hasta era consciente de que no había dejado de mirar su cuerpo. –El beso solo demuestra lo mucho que te quiero, y que no quiero que te juzgues a ti mismo, que te hundas de esa forma tú mismo, Yeongue escúchame atentamente, me gustas– Puso una mano sobre su cintura y otra en su rostro, lo miro de manera tan intensa que Yeongue juraba que podía ver su alma. –Me gustas Yeongue, me gustas demasiado– Yoonbin se encargó de unir sus labios en un beso en el que solo rosaban sus labios, el menor se encargó de moverlos, buscando sentirlo aún más, Yoonbin mordió el labio inferior y succionó este como tanto quiso, cosa que hizo soltar a Yeongue un quejido permitiéndole jugar con la lengua del menor.

El beso duro solo unos minutos más, el pequeño no tenía mucha experiencia y se sentía tan abrumado, Yoonbin lo sabía por la forma tan fácil en la que se avergonzaba y los temblores que tenía cuando sus cuerpos rozaban. Lo cargo por las piernas haciendo que se vea al estilo princesa y lo dejo caer sobre la cama, se hecho a su lado para acariciar cada uno de sus cabellos, con tanta delicadeza. –No quiero que dejemos de hablarnos..no me gusta estar lejos de ti y menos que, le des más atención a los demás que a mí–  Su tono fue tan serio que supo que no estaba bromeando, Yeongue asintió tranquilamente y busco apegarse a su hyung para sentirlo aún más cerca, oculto su rostro entre el cuello del mayor.

Ambos se sentían tan tranquilos cuando estaban así de cerca, y tanto Yeongue como Yoonbin esperaban poder debutar juntos y seguir haciendo estas cosas por mucho más tiempo.

j e a l o u s y [YoonBin x Yeongue] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora