En defensa de los muchachos feos de Arequipa; todos esos gordos, chatos, misios, precoces y tristes aguantados desta ciudad.
Dice así.
"A la chica que nunca me hizo caso".
Me pides cartitas de amor,
aquí tienes mi servilleta,
tiene un poquito de mí: un poco de sangre, una lágrima ajena
i un moco verde que nunca pude sacar.
Me pides verdadero amor,
aquí tienes mis poemitas de mierda
que nadie me compró en la combi,
i que la señito sanguchera usó
para prender fuego.
Me exiges cosas de literatura,
me pides cosas de telenovela
i cancioncitas cursis de cantantes tristes.
I yo no puedo, no tengo ese talento,
no tengo el corazón de los principitos azules,
aquí dentro,
solo late un corazón de carne
i te quiero con ese corazón de carne,
de glóbulos rojos enfermos
i trocitos de chinchuli barato.
Eso late aquí dentro.
I si no te ofrezco amor eterno,
es porque no sé mentir
como los galanes de la tele.
Pero si te prometo algo:
que de aquí a 50 años,
cuando aplastada estés en un sillón,
rodeada de puñeteros nietos,
gorda, vieja, arrugada... i muy sola en tu corazón,
en ese momento serán los recuerdos tu único consuelo.
I entonces recordarás las palabritas que te decía
en la flor de tu vida,
esas palabritas en la vuelta de la esquina,
tu i yo a la sombra de un poste alcahuete,
pecando deliberadamente a escondidas de los acusadores...
Eso recordarás,
palabritas que te susurraba en la orilla de tu boca.
En 50 años, no recordarás las veces que botaste tu vida
dando vueltas en los centros comerciales,
no recordarás esas Hilachas que hoy llamas moda,
ni huachaferías, ni contraseñas, ni LIKES, ni comentarios.
Nada de eso te importará ya.
Pero sí sonreirás, en tu triste i solitaria vejez,
sonreirás con esas palabritas
que ningún príncipe maricón
podrá decírtelas jamás.
Solo yo i mi corazón de llanta quemada.
Porque no puedo amarte,
Eso se los dejo a las historias de amor.
Pero si puedo quererte,
quererte
con el cariño de los gusanos,
devorándote bajo la tierra
sobre el cadáver del mundo.
Quererte con la humildad de dos perros
que se lamen las heridas,
masticando un huesito bajo el sol de la vida.
I hoy te lo propongo,
frente a todas estas sombras sin importancia:
Fabriquemos recuerdos para tu vejez,
aquí i ahora, en este salón o en el trabajo,
metidos en el bolsillo de tu mochila.
O si quieres después, pasada la tarde,
conmigo al costado de un tacho de basura
al abrigo de palomas poetizas.
Tú, escuchando mis mentiras,
i yo, jugando con tus labios de fuego líquido
mientras te digo:
"Siempre habrá un lugar para ti
En el infierno de mi corazón".
Este poema, hoy 24 de diciembre, va dedicado a todos esos mártires que hoy serán sacrificados para tu noche buena ¡Amigos pavos, aquí os recordamos!
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UN PUÑADO DE LETRAS Y LOCURA
شِعرADVERTENCIA: Debo decirte que las páginas siguientes no contienen lo habitual; en ellas hallarás algo distinto, aunque sin pretensiones, pero sí muchas transgresiones. Dicho esto, yo te prometo: Querencias ilegítimas, crónicas inverosímiles, plegari...
