Marry Me - Daniel Seavey

Capítulo 24

Keri:Esto...-Se queda pensando si debería decirme la verdad o no.-No es un buen momento para hablar de ello, estas agobiada por la operación y no es bueno que lo estés aún más por una cosa sin importancia.-Dice tranquila.
Ale:No lo parecía cuando no sabíais que estaba escuchando,¿qué pasa?-Digo insistente.
Marta:Nada lo suficiente importante como para que te preocupes.-Dice en el mismo tono que Keri.
Daniel:Tienen razón, no te preocupes por ello ahora. Vamos a ver que encontramos.-Dicho esto me vuelve a coger en brazos y me lleva hasta la nevera.
Ale:Pero...-No me deja terminar.
Daniel:Nada de peros enserio, créeme que es mejor así.-Dice dándome la espalda.
Ale:¿Tu lo sabes?-Digo curiosa.
Daniel:Claro, ya te lo dije hace tiempo que les escuché hablar.-Me dice al oído para que yo solo le oiga ya que las dos se encuentran a escasos metros de nosotros.-Bueno,¿Quieres unos huevos con bacon?-Dice cambiando de tema.
Ale:Esta bien, pero tu también te los comes conmigo.-Digo riendo.
Daniel:Claro, yo también muero de hambre.-Dice mientras lo sirve en dos platos y se sienta a mi lado.

Durante la cena improvisada ninguno de los dos habla, pero no es incómodo. Cuando terminamos Daniel se dedica a lavar los platos mientras canta y yo solo le escucho.

Después de que termine me lleva a su habitación de nuevo y decidimos ver una película ya que ninguno de los dos tenía ganas de dormir.
Balto se nos unió quedando entre nosotros dos por lo que la poca distancia que nos separaba se hizo más notable.

Ale:Creo que me debería ir ya a dormir, se de uno que mañana tiene que ir a clase.-Digo desviando mi vista de la televisión haciendo que el haga lo mismo.
Daniel:Creo que no iré, total repetiré si no me ayudas.-Dice desanimado a la vez que riendo.
Ale:¿Me esta usted chantageando señor Seavey?-Digo riendo.
Daniel:Puede...-Dice sin dejarme de mirar a lo ojos.
Ale:Pues que sepa usted que lo haré, pero solo porque me aburro mucho y no tengo nada mejor que hacer.-Digo sincera.
Daniel:Muchísimas gracias de verdad.-Dice y me da un abrazo el cual yo correspondo.
Ale:No hagas que me arrepienta.-Digo seria y me levanto a por mis muletas.
Daniel:Tranquila no te arrepentirás.-Dice con una sonrisa de oreja a oreja.
Ale:Esta bien, pero llevame a mi cuarto, no me apetece andar.-Digo riendo.
Daniel:Claro.-Dicho esto me vuelve a coger en brazos como las anteriores veces y me lleva hasta el.
Ale:Buenas noches Daniel.-Digo una vez me encuentro pisando tierra.
Daniel:Igualmente.-Dice y me da un beso en la mejilla antes de irse.
Ale:Que sepas que empezamos en cuanto vuelva a casa.-Digo algo alto para que me escuche cuando ya esta casi llegando al suyo.

*Dos días después*

Hoy es el día en el que me operarán y no puedo estar más nerviosa, no he conseguido dormir en toda la noche sin poder dejar de pensar que algo puede salir mal, aunque ya me han dicho por activa y por pasiva que todo va a salir perfecto y que dentro de unos meses puede que vuelva a andar, pero quien dice meses puede decir años.

Me encuentro en el hospital junto con mi madre, Paula, Jeff, Keri y Daniel, ya que no querían los médicos que hubiera mucha gente durante esta, pero luego cuando ya me encontrara en la habitación todos podrían venir a verme.

Doctor:Buenos Días,¿estás lista?-Dice con una sonrisa.
Ale:Si le digo que no,¿no me operará?-Digo nerviosa.
Daniel:Tranquila cuando salgas estaré el primero a tu lado.-Me dice al oído lo que hace que me relaje un poco.
Doctor:Bueno, me temo que de todas maneras lo tendremos que hacer si quiere volver a caminar en un futuro.-Dice sin dejar de sonreír.
Ale:Esta bien-Digo no muy convencida.
Paula:Te veo en un rato Primi.-Me dice antes de que me lleven en una silla de ruedas hasta otra habitación en la cual me hacen ponerme una bata de hospital y me dicen que me tumbe en la camilla que me van a dormir después de eso no recuerdo nada más ya que a los pocos minutos de tumbarme en esta todo se vuelve oscuro.

Me despierto por yo ruido que viene de la habitación, abro los ojos muy despacio ya que estos tardan en acostumbrarse a la luz que hay en esta. A la primera persona que veo es a Daniel como me había prometido lo que hace que sonría inconsciente al igual que él.