¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
me:
La noche había golpeado las calles de Seul, y el frío comenzó a cancomer las puertas de las casas, podía jurar que estaban a grados mas altos que los días anteriores pero a los jóvenes que se encontraban en medio de la nada, tomando y riendo no les importaba en absoluto el frío, podría decirse que ni siquiera sabían a qué grado estarían hablando, pues sus cuerpos estaban enfocados en la cerveza y la marihuana que estaba enfrente de ellos.
Seguramente eran las diez de la noche, y en ese lugar vacío donde siempre se encontraban junto a sus demás amigos ya era tan oscuro que solamente las luces de las calles de Seul se dejaban ver a los lejos, Jungkook se hayaba empinando la botella hacia arriba, dejando que el liquido cayera justo a su boca, a la vez que veía el hermoso paisaje que le dejaba ver esa colina oscura y desolada hacia las luces.
—Asi que..—comenzó tambaleando sus palabras —¿Volveras a Tailandia?
—Sí, de hecho creo que volveremos dentro de dos meses, queda muy largo, así que de eso no te preocupes..—sonrió con tanta ternura, elevando su mano hacia la muslo de Jungkook, sobando ahí, con seguridad. —Por eso te he citado, ya sabes, sin los chicos, quería decirte esto porque sabes que eres importante para mí.
—Aja, lo sé —bufó, chirriando sus dientes y apartando la mano de Lisa de pronto, esta entendió, Jungkook no era de sentirse mal ante las despedidas de sus amigos, sin embargo sabia que después de cinco años de amistad quizás le dolería un poco su partida. —¿y ahora qué? Fácilmente podrías decirle a Yoongi que me hablara por Kakao y decirme esta maldita noticia, que sinceramente me importa una..
Se detuvo, al ver las palabras que estaba diciendo, y la persona con quién las decía, así que dio marcha atrás y farfulló para luego acostarse sobre la manta que cubría el césped picoso.
—Dilo, quiero que tengas el valor de decirmelo, si te importa una mierda, dime en la cara, te juro que me largo de aquí..—esta vez fue Lisa, que con regañadientes hizo que Jungkook la observará, él sabia que ella no estaba de broma cuando sus ojitos se ponían rojos y su mandíbula se revelaba mas de lo normal.
—Lisa, sabes que no me importas una mierda, lo sabes..—dicho eso, estiró su mano para alcanzar la cintura de la peliamarillo, y con la otra tomaba un rollo de marihuana.
Encendió aquel papel y lo metió a su boca, aun con sus ojos en la figura de su amiga, preguntándose porque sentía todas aquellas cosas, todas aquellas cosas que le repetían que era un idiota por sentirlas, pues la conocía hace cinco años y debía haberla tomado como una hermana o al menos como una amiga, pero no, su hermosa figura y su maldita forma de ser le hicieron sentir otra cosa, una cosa llamada cariño, y hace un año sentir un sentimiento nuevo, quizás deseo por recorrer con su lengua su abdomen plano hasta llegar a su monte de venus, soñando que gritara su nombre.
