Capítulo 19. Romelle

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Una Alteana...

Una Alteana fue suficiente para que nuestra confianza en Lotor se desvaneciera, como si nunca hubiese existido.

Una Alteana fue suficiente para que Keith regresara de la espada de Marmora, con su madre y con una prueba vital de que Lotor no era un santo.

Una Alteana fue suficiente para que peleáramos dentro del campo de quintaescencia y destruyéramos el castillo de los leones.

Una común y traviesa Alteana.

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Quedamos varados en un planeta cercano a donde fue la explosión de la brecha al campo de quintaescencia, nos encontrábamos un poco asustados, al menos yo lo estaba, Pidge no encontraba la manera de comunicarse con los rebeldes, con nadie, en general, Hunk y yo recolectamos un poco de leña para crear fuego, o cualquier cosa que creara calor, pues los leones se habían quedado sin energía y al destruir el castillo de los leones, no había nada que pudiese recargarlos, por lo tanto no crearían calor al llegar la noche. Keith, Kórann, Allura y la madre de Keith, Krolia y Romelle se encontraban encerrados dentro del león negro, haciendo todo lo posible por resanar a Shiro. De vez en cuando, Pidge entraba a hacer análisis y ajustes a la maquina sanadora del león negro, curiosamente era para emergencias, y solo el león negro la tenía, así que fue un alivio para todos.

Había un tema que me preocupaba acerca de aquellas visitas que hacía Pidge, pues cada vez que salía, mostraba una cara deprimida y cansada, después de eso, solo se encerraba en su león, tratando de conseguir alguna señal.

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Dos días, dos días, los cuales parecían ser años, al menos para mi. Hunk estaba ocupado explicándole algunas cosas a Romelle, lo que era Voltron y quienes eran sus integrantes, así que yo sobraba un poco en aquella conversación, así que cuando vi a Pidge caminando en dirección al río, con una caja enorme entre sus pequeños brazos, de tecnología vieja, decidí seguirla e intentar despejarme como cuando hacíamos eso en el castillo.

—Hey, Pidge, ¿Qué tal todo? — me posé detrás de ella mientras le seguía el paso.

—Lance— pareció sorprenderse por mi presencia, hasta parecía un poco incomoda— ¿Qué tal? ¿Todo bien con Romelle? —

—Si, esta intentando procesar todo lo que paso, como todos...— deje de hablar, la cara de frustración y tristeza de Pidge me indicaba que no era bueno tocar este tema por un tiempo, no al menos hasta que Shiro este recuperado— Déjame ayudarte— mencione mientras quitaba aquella gran caja de sus brazos y la cargaba yo. Realmente era pesada, ¿Por qué no pidió ayuda? ¿Acaso es más fuerte que yo? ¡Imposible!

—Gracias, por favor ponla por aquí— Dijo mientras avanzaba un poco más y me señalaba un montón de tecnología chatarra ¿Cuándo había llegado todo esto aquí?

—Woow, ¿Desde cuando has estado trabajando en todo esto? — recargue la caja en donde me pidió y observaba el desastre que había.

—Pues, casi desde que llegamos, pensé que talvez porque los leones se quedaron sin energía no podamos comunicarnos con la coalición o con mi papá, ya sabes, lo normal— Pidge desviaba la mirada con constancia, parecía querer distraerse de su mente.

—¿Es por eso que cada vez que sales del león negro, te siento más decaída que cuando entraste? — su pequeño cuerpo paro en seco, me daba la espalda, creo que había acertado.

No toques a mi princesa [Kidge].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora