Se encontraban caminando juntos hacia los demás en el gran salón, se tiraban miradas juguetonas o pequeños toques de aquí para haya para ellos era un juego, pero a simple vista parecían una pareja de adolescentes, muy tierna para la persona que les viera haciendo eso.
—y para que querían que nos juntaremos,¿paso algo?–pregunto Arthur mirando fijamente a Zeldris, mostrando un pequeño sonrojo en sus mejillas.
—querían asegurar algunos datos,ya sabes si quedaba demonios rebeldes o algunos que otros casos molestos– dijo zeldris con el un tono aburrido,mostrando una mueca de desagrado.
—parece que no te agrada mucho la idea ¿cierto?, entiendo,pero muestra una sonrisa y todo irá mejor–dijo Arthur alegremente tomando el brazo de Zeldris.
—ojala viera la vida desde tu perspectiva–dijo susurrando lo último con un tono de pena para alejarse un poco de Arthur y seguir con el trayecto.
Por fin habían llegado donde los demás Arthur se sentó en la cabesilla de la mesa y Zeldris al lado de su hermano, pronto la guardia real acabaria con los demonios rebeldes restantes,aunque hubieron perdidas en ambos bandos, ya querían terminar con esto rápidamente lo antes posible.
Después de dos horas de reunión,todos se levantaron y se retiraron a sus tareas o a sus aposentos.
Zeldris,tenía que seguir preparando a los novatos nuevos, tendría que tener paciencia,ya que no quería tener otra pelea con Arthur por algo tan estúpido,se dirigió hacia el lugar del entrenamiento donde se encontraban los novatos o como les gustaba llamarlos carne fresca.
Todos notaron la llega de Zeldris,corriendo al frente para formar una línea,todos derechos mostrando pecho,le tenían mucho respeto o más bien miedo—haber imbéciles,más vale que hoy día ponga empeño o los daré de comer a mis mascotas y les aseguro que no son para nada amigables!.
Pasó toda la tarde gritan de aquí para haya, como podían ser tan estúpidos les daba una simple orden, practiquen con su compañero de igual nivel, combatan a sangre fría, y si ganan reclamen todo lo que tenga,¿era acaso tan difícil?,se sentó en una banca cercana a la sombra de un árbol grande, soltando pequeños suspiros, sí que no tenía paciencia.
Quien diría que terminaría siendo maestro de humanos sus antiguos enemigos,pero bien el lado positivo por lo menos lo respetaban como era debido.
Con tal pensamiento soltó aire de grandesa,aunque en el fondo sabía que tenía que olvidar su pasado, también dejar atrás a su amor perdido, eran para el cambios drásticos pero tenía que seguir adelante aunque ubiera quedado con el miedo a enamorarse nuevamente y lo que podría causarle a la gente a su alrededor, un temor que lo seguía día y noche.
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Zeldris caminaba por los pasillos ya frustrado el día se había echo muy largo para el,el entrenamiento duró mucho más de lo esperado, aunque ahora venía lo difícil tenía que darle lecciones a Arthur,aunque sinceramente el no creí que el lo necesitase ya que peleaba muy bien y más con la espada.
Se dirigió a la biblioteca, abrió las grandes puertas de madera de roble decorados con dorado,en el centro se encontraba Arthur sentado en una silla leyendo un libro gigante,que se notaba que era muy antiguo, Zeldris se dirigió hacia el sigilosamente apareciendo atrás de el.
—bu~– dijo zeldris de forma seductora,asustando a Arthur haciendo que este se sonrojara por la cercanía de sus rostros.
—i-idiota,me asustaste,y que haces aquí,¿vienes a molestarme emo?–dijo lo último en tono burlón.
—vengo a entrenarte un poco, así que ven conmigo al sector de entrenamientos–dijo zeldris poniendo a caminar hacia la salida de la biblioteca.—oye e-espera por favor– dijo Arthur apurando el paso detrás de Zeldris.
Se dirigieron hacia el sector de entrenamiento, Arthur estaba con una armadura de entrenamiento, Zeldris estaba listo para peliar en cualquier momento.
El primero en atacará fue Arthur,salió disparado hacia a el a una velocidad que sorprendió a Zeldris, le tiraba estocadas consecutivas sin parar, Zeldris las esquivaba o las paraba cuando podía, tenía que admitir que Arthur era muy bueno, Zeldris no se quedaría atrás.Zeldris tomo el brazo de Arthur,para hacerle una llave poniendose detrás de él quedando los dos muy apegados, haciendo que Arthur soltará un pequeño quejido muy suave,y dulce para los oídos del contrarió.
Zeldris lo tiró hacia el piso tomando sus muñecas dejándolo inmóvil,mirándolo fijamente diciéndole —¿ te rindes?,o ¿quieres que siga humillando te?.
—eres muy malo eh~,bueno acepto mi derrota,¿me dejaras ir?~.–dijo Arthur coquetamente, se encontraban en una pose un poco comprometedora en ese momento.
Zeldris se separó rápidamente de Arthur sonrojado hasta las orejas, ayudó a levantar al joven príncipe del suelo quedando los dos juntos.
—Arthur te gustaría ir conmigo a eso celebraciones que hacen los humanos,y no me digas que no,por que gane en esta pelea y merezco un premio!.
—ah~,quieras decir al festival, y esto suena más que una cita,pero si acepto,seria divertido ir con un amigo...dijo cl-claro por que eso somos! HAHAHA..si eso–dijo Arthur nerviosamente tratando de no alterarse demasiado frente a Zeldris.
—s-si...,bueno entonces paso a las 7 por usted espero que no te tardes tanto niño mimado —dijo zeldris con un tono juguetón.
—que pesado eres,pero ahí estaré bueno...nos vemos –Arthur se acercó a Zeldris depositando un beso en su mejilla para luego irse agitando la mano.
