70 days before

154 16 5
                                    

La luz del amanecer le quemaba los ojos. Los faroles aún seguían encendidos a pesar de ser ya las seis de la mañana. El movimiento del auto le revolvía el estómago, causándole acidez. Tocó suavemente su abdomen mientras soltaba un quejido arrepintiedose totalmente de no haber comido desayuno.

–Debiste tomar desayuno, Hae. – Donghyuck volteo a verlo con molestia. El chico no volteo a verlo, seguía observando cada casa que pasaba con gran rapidez por la velocidad del auto; como si no lo hubiese visto unas millones de veces antes.

–Tal vez, si no madrugaras para venir a recogerme entonces yo hubiese gozado de un buen desayuno. – se quejó.

Mala idea, su estómago reaccionó haciéndolo formar una mueca. El ardor estaba empeorando.

–No es mi culpa que despertarás tarde y no te diera tiempo de desayunar.– suspiro volteando a ver a Donghyuck. –¿Qué demonios estabas haciendo toda la noche?

–Estaba filosofando.

–¿Sobre qué, sobre Hitler?

–Eso no te incumbe.

–Te voy a quitar tus documentales Hyuck.

–¿Acaso tienes control sobre mí?

–Sabes que sí. – sus ojos hicieron contacto. Muchas verdades que Haechan no quería recordar estaban ahí, en ese simple contacto. La verdad estaba presente y inevitable, él prefería ignorarla por su salud mental.

–Mark. - habló, casi demandando.

–¿Qué?– el chico respondió con los ojos abiertos como canicas, tan característicos de él.

–Callate.– sonrió falsamente y dejó el auto.

–Yo también te adoro, Hae. – bufo colocando su mochila en la espalda mientras cerraba la puerta del auto.

El moreno caminaba por los concurridos pasillos de la escuela, dirigiéndose a paso veloz a las máquinas expendedoras, tal vez unas galletas y un poco de café servirian para calmar la insoportable acidez de su estómago.

Las miradas lo seguían, tanto hombres como mujeres lo observaban, algunos con asombro, otros con deseo y si somos sinceros, le encantaba. Adoraba ser el centro atención, protagonista de las fantasías y sueños húmedos de sus compañeros y vaya que lo dejaba en claro. Una sonrisa pícara se formaba en su rostro mientras caminaba por el pasillo. Le encantaba seducir, esa era su especialidad.

–Ten cuidado al frente. – una voz atrás de él sonó. Cuando nó su perro faldero Aka, su mejor amigo Mark Lee. Okay tal vez, perro faldero es una exageración, Haechan adoraba a Mark, se conocían desde que eran espermas. Pero joder, su estómago ardía y esa mañana no era su mañana.

Volteo a ver a Mark rodando los ojos, quién mantenía su mirada en unos papeles mientras lo leía, llevaba sus típicos lentes redondos enormes. 'Maldito ciego' a Haechan le daba gracia esto, aunque debía admitir por lo bajo que se veía jodidamente bien con ellos.  Volvió la mirada al pasillo mientras empujaba su lengua contra su mejilla. Unos señores pasaban cargando carpetas, que de seguro iban de camino al gimnasio.

–Oye Hae, hoy hay...

–Una junta, lo sé. – el día se había echo más desastroso. – Ahora, si me permites iré a comer algo antes de morir se inanición.

–Ya deja tus documentales Hae. – pronunció casi cantando.

–Y tu deja de joder antes de que te calle a golpes. – canturreo. Mark río con su típica sonrisa que lo hacía ver cómo retrasado. Era tierno, muy tierno para su gusto y desafortunadamente era algo con lo que tenía que lidiar toda su vida. A Haechan no le daba gracia, el solo quería una galleta.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 17, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

No Longer || NoHyuck / MarkhyuckDonde viven las historias. Descúbrelo ahora