La chica del escrito (2/3)

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Al paso de los días, Lance pareció perder interés en aquella libreta azul. Dejó de preguntar por el paradero de ésta a las personas con las cuales compartía clase. La importancia por aquellas páginas se esfumó.

Terminó comprándose otro cuaderno, ahora con tapas de coloraciones azules y verdes.

Lance seguía escribiendo, ahora con ese nuevo cuadernillo y conforme las letras aumentaban en sus nuevos escritos, la curiosidad de Pidge de los nuevos y viejos renglones, crecían.

Pidge esperaba que al paso de las semanas ella olvidara aquella obsesión de leer los diversos textos creados por su amigo, pero se había convertido en una rutina el leerlo tras regresar de un agitado día de clases.

29/01/2016
No quería pensar en ti en vacaciones, para ello tendria los cuatro meses de clases que seguirían tras este descanso. Pero fue un esfuerzo inútil.
Cuando la oscuridad daba señales de que era hora de dormir era cuando más pensaba en ti.
¿Qué estás haciendo ahorita?
¿Pensarás en mi?
No sabía que señal me habías dado para considerar, mejor dicho, para imaginar en la pequeña probabilidad de que estuvieras pensando en mi. Sabía que no era para nada cierto. Que mi persona era irrelevante para que ocuparas de tu tiempo en si quiera acordarte del chico que parece confundido al hablar contigo.
Son las tres de la mañana, mis ojos arden por no dormir, y un pequeño dolor de cabeza se expande por toda ella.
¿Será de tanto que dedico en imaginarte? En evocar de mis recuerdos tu magnifica persona.
Sea cual fuera el caso, tenía claro una cosa; anhelo ya verte mi bella enamorada.

¿Una chica que le roba el sueño a Lance?
—¿Cuántas noches te has quedado sin dormir pensando en tu inspiración?.
Katie se vio envidiando a aquella chica. ¿Será tan encantadora como su mejor amigo relata? Tal vez era tan magnífica que Pidge, mejor dicho, que cualquier persona podría enamorarse de ella.
—¿Podría ser yo?—
Ella no entendía por que aquella idea no dejaba de invadir su mente. ¿Desde cuando McClain le había dado indicios para que sospechara que aquellas palabras eran para ella? Nunca. Simplemente eran pequeñas coincidencia que logró identificar Pidge y, que de forma errónea, atribuía como referencia a su persona.

05/02/2016
Llamaré a mi suerte simplemente como "el deseo de estar a tu lado"
El inicio de clases llegó. Mentiría si dijera que me emocionaba volver. Simplemente quería seguir durmiendo y mi cama motivaba tal aspiración con sus calientes y suaves mantas.
Pero una imagen llegó a mi mente.
Tus ojos. Dos bellos cristalinos llenos de brillo que denotaban felicidad.
Tu rostro. Facciones finas y suavidad infinita. Con un bello color sobre él.
Tu nariz, pequeña. Adorno clave en tu perfecto perfil.
Tu sonrisa con hoyuelos en ella. Tu boca a modo de curva mostrando aquellas bellas perlas.
Tu dantesca persona. Inmensa y brillante.
Mi corazón, mi mente, yo mismo me vi deseando el no volver a tener otro descanso dentro de mil años. Nadie necesitaría de vacaciones si tuvieran la dicha de disfrutar de una motivación tan perfecta, como tú lo eres.

Pidge rebobinó el cassette de su torpe memoria. Se acordaba de las clases que dieron inicio a ese ciclo escolar, de los profesores que se presentaron uno a uno, de los temas que tocarían a lo largo todo el año, de todo, excepto del momento cuando vio a Lance.

¿La fuerza del amor existe? ¿Amarte intensamente fue lo que me permitió estar este año a tu lado?
Me acerqué de manera esperanzadora a las lista de grupos del segundo año. "2A" nada. "2B", seguía sin aparecer. Me alegraba porque de igual forma tú tampoco apareciste.

Pidge&Lance [Plance/Pidgance]~ Algunas historias.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora