Capítulo: 60 "Viaje de noche"

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Mo XuaYu estaba corriendo hasta la salida de la villa con una sonrisa que denotaba vida, un brillo de libertad que resplandecían de sus ojos, con el corazón latiendo con fiereza, golpeando su pecho dolorosamente, continuo su camino a la Torre Koi, sin siquiera descansar para alimentarse o reponer fuerzas, la noche cayó sobre su cabeza, la luna se posó en el basto firmamento, sus piernas temblaron, como si fueran gelatinas, se desplomo contra el suelo, jadeo por el dolor y cansancio, su corazón latía velozmente, su pecho ascendía y descendía en descontrol, pero su sonrisa seguí aferrada en su rostro, cayó sobre un campo de flores, el aroma que desprendían era dulce, relajante, el doncel bostezo y se taño los ojos, sus parpados pesaban, su cuerpo estaba sumamente agotado, lentamente se sumergió en un profundo sueño, perdido en los brazos de Morfeo.

Las horas pasaron, el doncel se removió entre el pasto y las flores, lentamente abrió sus ojos, la luz era tenue, el sol se estaba ocultando detrás de las montañas, el canto de los grillos lo arrullaban, una fresca brisa provoco que sus bellos del brazo se erizaran,... ¡¿El sol se estaba ocultando detrás de las montañas?!... estaba anocheciendo, durmió casi por un día completo, asustado se irguió, ya con fuerzas y con energías recuperadas, se preparó para continuar lo antes posible, cuando estaba listo para emprender su recorrido su vista se fijó en el capullo que apenas comenzaba a abrirse; en la noche anterior habían hermosas flores de color azul palo, en el centro era de color blanco, pero cuando el sol regresaba la flor se cerraba en un capullo, al verla detenidamente recordó que antes en la pequeña biblioteca de GuanYao había leído sobre esa flor, se llamaba la Flor de la Luna debido que siempre floreaba en la noche, antes los rayos de luz de la luna, además desprendía un aroma dulce y tranquilizante, que al olerla caería en un sueño, debido a sus propiedades de somníferos en el polen.

Avanzo unos cuanto metros, pero un grito lo puso alerta, voltio hacia atrás para ver a cuatro hombres acercándose hacia él, su rostro palideció, su sonrisa desapareció de su rostro, sus piernas se negaron a responderle, su corazón se detuvo al igual que sus respiraciones.

-¡Ahí esta! – Grito Mo Yuan, al lado de él estaba el señor Mo y detrás de ellos sus fieles y desagradables sirvientes, A-Tong y A-Ding.

El doncel por unos segundos estuvo en shock, sin saber que hacer o que decir, luego de inmediato se hacho a correr a cualquier dirección, los otros a cortaron la distancia extremosamente, casi lo alcanzaban, sin embargo A-Yuan saco una piedra de sus túnicas y la aventó con fuerza, el doncel cayo contra el suelo, su cabeza empezó a sangrar, una leve rajada se forma en su cabeza empapando sus cabellos de sangre, A-Tong y A-Ding lo estamparon contra el piso, sosteniéndolo de los brazos, el doncel empezó a temblar, trato de zafarse, grito por ayuda paro nadie se encontraba a su alrededor, la impotencia volvió a invadirlo.

-"¿Este es parte de mi castigo?" "¡¿Darme esperanzas, ilusiones para luego destruirlas frente a mis ojos?!" – Pensó el doncel, su voz se quebró al igual que sus ilusiones, rompió en llanto y suplico.

- Por favor dejen me ir. – Los cuatro estallaron en carcajadas.

-No ¡Entiende tu eres nuestro! – Grito A- Yuan mientras lo jalaba de los cabellos, obligándolo a alzar la mirada hacia la suya, una desagradable y lasciva sonrisa se formó en sus labios.

-Sujétenlo, lo aremos los dos al mismo tiempo. – Dijo el señor Mo con una sonrisa y un brillo de lujuria en sus ojos, su hijo asintió sonriente, los sirvientes lo volvieron a estrellar contra el suelo, sujetándolo fuertemente de las muñecas y tobillos, el doncel se removió con fuerza, grito por ayuda hasta que su garganta doliera.

-¡Ya cállate maldita puta! – Grito Yuan mientras abofeteaba al tembloroso de su primo mayor por tan solo dos años, sin embargo, el brillo de una espada rozo su cuello, luego giro en el aire y se regresó rozando el cuello del señor Mo, un hombre con túnicas negras, de rostro serio pero amable hablo fríamente.

-¿No ven que el joven no quie... – No termino su pregunta, su rostro denoto asombro e incertidumbre.

-¡¿Wei Wuxian?! – Grito Son Lang, de inmediato aparto a los cuatro hombres de túnicas grises y lo tomo de la mano amablemente, observo detenidamente al doncel, luego negó su cabeza y realizo una reverencia.

-Disculpé lo confundí con otra persona, ¿Esta usted bien? – Pregunto preocupado.

-No del todo, por favor ayúdeme. – Suplico con su voz quebrada, al ver que esa persona era su única salvación se aferró a su brazo, Son Lang asintió, con unas simple palabras de advertencias, los cuatro asintieron a regañadientes, bufando se regresaron por donde llegaron, ya que ante ellos estaba un cultivador armado así que era estúpido pelear contra un sujeto así, por lo que optaron por dejarlo ir, después recuperarían a su doncel, ya que era de ellos y de nadie más.

XuanYu se presentó adecuadamente, le contó a donde se dirigía, Son Lang se dirigía por el mismo camino así ambos fueron juntos, ambos caminaron hasta que amaneció, luego Son Lang se despidió y tomo otra ruta pues debía regresar con su doncel y su hija que esperaban su regreso. 

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elvis-Sempai

El doncel del amor y la cultivaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora