La verdad no sé por qué me preocupo en que alguien como tú me deje. Y no es que alguien como yo sea excepcional, realmente me encuentro muy ordinaria, común, aquella chica que encuentras en todos lados, cómo esos anuncios de comida rápida, servicios que nadie necesita, obstruyendo el campo visual de alguien. Sin embargo hay algo que viste en mi, me pregunte en ese momento si el sentimiento era parecido a cuándo escuchas esa canción favorita, o comer tú postre preferido, trate, cómo siempre de ignorar esto, de ignorar tu presencia por completo pero eres tan insistente que me rendí ante ti.
Me convencí a mi misma que era una buena idea - sólo déjate llevar - repetía ella en mi interior. Vamos que si la dejo a ella tomar el control todo acabará siendo un hermoso desastre. ¿Acaso no vez las cicatrices? Me heriste gravemente y eso no tiene que volver a pasar, sigue durmiendo, descansando, lo que sea que hagas pero no salgas.