Zootopia You are not alone.

Diferentes perspectivas

Capítulo 4

"HELLO EVERYBODY COMO ESTAIS, ESPERO QUE BIEN, ESPERO QUE TODO CORRECTO YO QUE ME ALEGRO

Aquí les traigo otro capítulo yyyyy.... de hecho no se que más decir....tal vez se me ocurra más abajo, ahora si vamos a leer"

(North Point, casa de los chicos, sabado 7:00 am)

Sábado, un día en el cual puedes salir, divertirte con amigos, estar con tu pareja, o simplemente seguir durmiendo.

Claro... para los que trabajaban era algo diferente, abrían sus negocios para los animales que iban a pasar el rato y... para los que trabajaban para los bomberos, hospitales o en este caso la ZPD... tenían que trabajar y mantener la ciudad protegida del crimen, como dice el dicho "El mal no descansa".

En una casa cerca de North Point, los cuatro chicos que ahora viven en la parte de arriba estaban dormidos, poco a poco el lobo empezó a abrir los ojos lentamente, se los tallo y decidió levantarse, era el primero en hacerlo, los golpes que recibió ayer lo molestaban un poco, pero podía aguantar.

Tomó su uniforme y lo puso encima de su cama, volteó a ver a su compañero de habitación que todavía estaba dormido, acto seguido se dirigió al baño y se dio una ducha con agua caliente, algo relajante para el sitio en el que vivían.

Salió con el pelaje húmedo, se secó y salió del baño con unos boxers, se puso el uniforme y antes de salir, vio al león todavía dormido.

-Chris despierta hombre, hoy es nuestro segundo día en la ZPD- dijo acercándose a él.

-Ya voy mami- dijo quejándose abriendo los ojos y tirandole una almohada, éste la esquivó y salió de la habitación, al salir miró por la puerta de cristal como ya había sol y un poco más actividad en la ciudad, los autos transitar y los animales caminando a sus trabajos o a hacer sus mandados.

-Pst, Ross- susurro el gueopardo desde la cama de la parte de arriba, éste movió sus orejas y se asomó, el gueopardo le hizo señas para que subiera en silencio, éste lo hizo.

Al estar arriba vio a Albert durmiendo como si lo hubieran atropellado, rió ante eso, luego vio a Adam que apenas se estaba levantando.

Leonard le hizo señas para que se levantará, éste lo hizo y los dos se acercaron al oso durmiente, los dos sabían que tenían que hacer.

El lobo empezó a silbar.

-Hijo- dijo Adam fingiendo la voz de una ancianita- Otra vez te quedaste dormido en nuestra habitación- éste se quejó un poco.

-Sabes que tienes que ir a tú habitación- dijo Leonard fingiendo la voz de alguien mayor dándole un lepe en la frente, Adam lo golpeó de igual manera un poco más fuerte- Eres malo Albert- continuó el lobo, los dos rieron levemente mientras el oso se cubría y se quejaba.

-Albert, el ave esta mejor Albert, y quiere hablar contigo- dijo Leonard con su voz normal mientras volvía a silbar, puso sus patas como si fueran alas para después darle pequeñas bofetadas, el oso se quejaba mientras Adam se reía por cómo hacía.

-Albert serás el mejor salvavidas... en la piscina- continuó el lobo mientras que con sus dedos le tapaba la nariz.

-No respires hijo, no respires- dijo Adam con voz de abuelita.