"Arte para seducir"

Parte 9: Deshonra familiar

9-Deshonra familiar

**Renji**

Tras hacer mis averiguaciones y gracias a la ayuda de Grimmjow, he conseguido saber lo que el director Aizen y Byakuya se traían entre manos. Habían pactado tener sexo a cambio de la liberación de Kaien, y el tío había cumplido con su promesa por muy extraño que pareciera.

Así que aquí estoy yo. Al lado de la puerta cerrada del despacho del director oyéndole hablar con Byakuya dentro. Puedo oír la exclamación asombrada de mi hermano cuando Aizen le comunica que ha llamado a prisión para movilizar el proceso e indultar a Kaien para que salga, por lo que todo ha salido bien....o eso parece. No creo que Aizen se conforme con un simple polvo, como si no supiéramos que le gusta tener a chiquillos a sus pies...es extraño que no se haya fijado en mí, pero mejor así, porque me pone la piel de gallina cada vez que me le cruzo y me sonríe.....es un tío vicioso. Antes de que Byakuya salga me voy corriendo para adelantarle. Yo seré el primero en encontrarme con Kaien, de eso estoy seguro. Me salto las clases sabiendo que no las uso muy de provecho, y saco la tarjeta del bus que me ha dejado Grimmjow para poder subir a uno.

La cárcel pilla más lejos de lo que parece y cuando llego intento entrar pero como siempre, hay guardias que me lo impiden. Yo no tengo nada que me identifique, pero en cuanto menciono a shiba Kaien, me comunican que han sacado a un preso hace unas horas, así que seguramente será él. Mierda. Vuelvo corriendo para pillar otro bus y regresar a la mansión ¿Dónde puedo localizar a este tío?? ¡Ya sé!! En cuanto llego subo corriendo por las escaleras del segundo piso y entro en el cuarto de Byakuya abriendo sus cajones para buscar su teléfono. Bingo. Él nunca se lo lleva al instituto, así que le encuentro sobre su mesilla vibrando. Tiene un mensaje nuevo.

-Byakuya ¡he salido de la cárcel! Voy directo a la mansión para verte, lo estoy deseando. Te quiero. S.K.-

Ju, perfecto, viene hacia aquí....y Byakuya no vendrá hasta que termine sus clases de violín, yo seré el que esté esperando a ese desgraciado en su lugar. Voy a mi habitación para cambiarme de ropa y ponerme un yukata ligero que deje entrever las pocas curvas que tengo. Me suelto el pelo intentando tapar los trasquilones que aún tengo y me pongo a ensayar frente al espejo alguna posturita sexy de provocación. Puagh. ¿De verdad me voy a atrever? Me da palo....pero es por el bien de Byakuya. Y por el mío, claro. Oigo el timbre y me estremezco. Seguramente ha abierto alguno de los sirvientes, ya que oigo pasos subir por la escalera y un silbido. Es Kaien.

-¡Byakuya!! ¡¡Estoy aquí!! ¿Me has echado de....menos...

Kaien me mira sorprendido al verme a mí sobre la cama de Byakuya en vez de a él. Se restriega el pelo algo nervioso y me sonríe acercándose.

-Ey Renji ¿Cómo estás? Hace mucho que no nos vemos ¿Qué haces aquí?-

-Te estaba...esperando....-

-¿A mí? –

-Kaien...me siento muy culpable por lo que pasó...no quería que te encerraran, estaba celoso...-

-Jaja, no pasa nada nadie tuvo la culpa. ¿Celoso? –

Trago saliva reuniendo el valor que me falta para ponerme de puntillas en la cama y tirar de su ropa para atraerle a mí y besarle en los labios. Él se aparta ruborizado y yo jadeo levemente por la efusividad del momento. El corazón me va a mil, tengo que calmarme o lo notará...

-¡Para, para! ¿Qué haces?? Esto no está bien, nada bien.... ¿dónde está Byakuya?-

-Aún en el instituto...por eso tenemos que aprovechar...-