Castigo Griego «j.b»

Capitulo 8

Capitulo 8

Aún era temprano, pero él no tenía nada que hacer, estaba de vacaciones al fin y al cabo... Barbara llego ronroneando a su lado y se acostó a su lado. Joder que preciosos ojos tenia.

Durmió unas horas, necesitaba descansar un poco su mente de esto, cerró los ojos y prontamente se encontró soñando. Un sueño que solo recordó anos minutos luego de haber recordado. Barbara se convertía en Barbara la verdadera, estaba denuda tirada en su cama, la simple imagen le causo una erección. Hizo el típico sonido con su boca para atraer a los gatos y Barbara llego nuevamente a su lado.

-Yo sé que eres tú. –La gatita levanto sus orejas como si estuviera sorprendida-

¿Qué tenía de malo intentarlo? , vamos, solo serían unos pequeños cortes... El tenía la confianza de que era Barbara no necesitaba a una jodida bruja para saberlo.

Se levantó decidido hacia el baño, a pesar de su miedo a la sangre, si el no la veía, estaría todo bien. Saco una navaja para afeitar. Salió del baño y se paró a mitad de su cuarto. Quizás si razonaba un poco... Joder Justin, hazte  hombre, se dijo.

Toco con al punta de su dedo la navaja y este comenzó a sangrar un poco, definitivamente tenia filo.

-Espero que tu lo valgas pequeña.

Barbara se encontraba parada enfrente de el, moviendo fuertemente su cola. Él se agacho y le hizo cariño en la cabeza. Se volvió a levantar y se miró la mano derecha... era zurdo no ocupaba seguido la mano derecha así que... Busco un punto definido de su mano en donde podría salir una cantidad grande de sangre, en el libro no decía ninguna parte definida, así que podría ser en cualquier parte verdad.

Se miró la palma de la mano y la toco. Vamos, al final igual tendría que hacerlo.

Primero paso suavemente la navaja por su mano, pero no corto.

-Vamos Justin.

Se alentó a si mismo. Y volvió a pasar la navaja esta vez muy fuertemente dejando caer sangre a chorros a la alfombra. Mama me va a matar, pensó, y miro hacia el techo, asegurándose que le cayera sangre a Barbara. De pronto sintió el maullido de Barbara. Instintivamente vio hacia abajo. Gran error. Vio como todo estaba manchado de sangre, Barbara estaba recostada y respirando lentamente, se miró la mano asustado.

-Joder. –Grito-

Corrió hacia el baño antes de que se desangrara por la mano y se tapó con unas vendas haciendo presión. Salió del baño con la mano vendada y vio que Barbara seguía igual. Joder, había caído, ¿que maricon sin vida habría escrito esa Mierda de cortarse? Volvió al baño, saco la venda de su mano esperando que la sangre se hubiera cortado un poco. Pero apenas saco el paño, la sangre volvió a correr a chorros. Mierda no, Mierda no. Se comenzó a sentir mareado. Cuando de pronto sintió maullidos.

-Barbara!.

Quería ir a verla, pero estaba demasiado mareado, de pronto de maullidos pasaron a gritos que espeluznante era, eran lloriqueos, desesperados, dio pasos no coordinados hacia afuera del baño, pero no vio nada mas que todo blanco. Se había desmayado....