Phoebe es exitosa en su profesión, más que feliz en su matrimonio, y pese a que Rose llega casi a los cinco años, la pequeña junto a Manuel de nueve meses, le muestran que es una aprendiz eterna de cómo ser una madre. Tres Zimmerman rodean ahora la...
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MIS ZIMMERMAN GREY ❤
No puedo hacer más que focalizarme en ser tolerante, no dejar que su presencia me afecte y ser tan cordial como se pueda... O más. Un poco de esfuerzo no cae nada mal. Me acerco a ella para saludar y brindarle un caluroso abrazo. Y por supuesto, presentarle a Clare como mi cuñada.
—Papá ha tenido que irse a la empresa de la cual es representante legal, y yo me he quedado porque tuve una emergencia y él no tenía el tiempo para esperarme. De verdad espero no ser una molestia.
—Para nada, Jasmina. Toda la familia es bienvenida a esta casa. —Digo, esperando que no se lo tome demasiado en serio. Lo que menos me apetece es tenerla metida aquí. — ¿Has comido ya?
—Algo, en el avión. Estoy en un estricto control de lo que como, mi trabajo requiere de mucho aspecto físico. —Me llevo las manos al estómago. Yo todavía tengo la muestra de que he sido madre, un par de libras de las cuales no me he liberado. — ¿Y los niños?
—Rose está jugando con Picky en el jardín, es nuestra mascota. Y Manuel dándose un pequeño descanso tras la comida. Pero ven, vamos a tomar asiento, para esperar a que regresen los chicos.
Le dejo pasar de primera, tomo aire, Clare me dedica una mirada de comprensión, sabe que algo anda mal, pese a que de verdad estoy intentando no mostrar mi incomodidad.
—Y tú, ¿Clare? Soy mala reteniendo nombres. ¿A qué te dedicas?
—Soy traductora en Grey Enterprisses. —Le responde. Se queda a un lado de donde yo me siento. —Phoebe, necesito ir al baño un momento, ¿Puedes quedarte con Hope? Ya regreso.
Náuseas.
Se va como una flecha, es el primer trimestre de su embarazo. Y según ha dicho, pasa noches fenomenales, pero las tardes son fatales. Náuseas, hambre, antojos y mal humor a todo lo que da.
— ¿Le molestó mi pregunta?
—No, es algo natural en su estado. Me va a hacer tía de nuevo. No tiene nada que ver contigo.
—Ah. Muy interesante que tu hermano y ella sean pareja, las relaciones personales dentro de la empresa.
—Cuando las cosas se dan, es por algo. A algunos se nos da la oportunidad de establecer una relación con quien se quiere, ya sabes, las cosas del amor. —Comento con toda la mala intención. — ¿Y tú? ¿De vacaciones en el trabajo?
—Para nada, he decidido darme unos días libres. Mi amigo es el dueño del lugar donde trabajo y saco provecho de mi ventaja. Papá debía viajar y tomé la oportunidad de hacerlo con él, visitar a Paul y a ustedes, por supuesto.
— ¿Tú si te piensas casar algún día, Jasmina?
La pregunta escapa de mi boca, ni siquiera me interesa.
