Casi Casadas - Albalia - Natalba - OT 2018

Casi real

Natalia ante el silencio de Alba sacó el anillo que la rubia había empeñado hace unos días.

"Alba Reche, cásate conmigo. Me siento super agradecida de haberte encontrado justo en este momento. Porque para mi desde el minuto cero desde que nos vimos fuiste ...

Casualmente, como en una telenovela, sonó el timbre. Lo ignoraron mientras se miraban fijamente y Natalia iba a continuar cuando sonó el timbre varias y repetidas veces de manera ya hasta desagradable.

Natalia, cabreada, le dio el anillo a Alba y fue a abrir la puerta.

Era Miki, el vecino que estaba enamorado de Alba y que junto a Joan, su compañero de piso, le metían fichas a la rubia. Alguna vez lo había intentado con ella pero un día ante uno de sus actos de hetero-macho cabrío para llamar la atención le dijo: PUAJ QUE AGHJCO hueles a heterobásico- y se fue. Desde entonces Miki procuraba llevar camisetas y/o sudaderas diferentes todos los días y se olía disimuladamente el sobaco antes de acercarse a ella. 

Miki intentó entrar, pero Natalia le cerró el paso: ¿Qué quieres?

- Venía a darle un polvorón a Alba que el otro día me dijo que no quedaban en su casa de los que ella podía comer.

- No hay nadie. Agur. - y le cerró la puerta en las narices quitándole el polvorón que dejo en la misma mesilla del recibidor.  Tras la puerta se oía a Miki cantar: No me hundo, no me rindo fácilmente...

Natalia volvió al salón donde Alba miraba embelesada su anillo.

- Naaat, ¿Qué hacemos con esto? - dijo la rubia señalando el anillo mientras se emocionaba.

Natalia tras la interrupción había perdido toda su valentía así que le contó cómo había surgido lo del casamiento sin decir que realmente se quería casar con ella y dejar de ser sólo su amiga.

"A ver, leí en Tumblr que si alguien finge una boda o se casa con alguien de verdad e invita a famosos y famosas al evento, estas personas les envían cosas caras como regalo de boda. Da igual que les invite gente que no las conoce, siempre mandan a su persona asistente que mande regalos caros o cosas que quieran de su lista de deseos de boda. Entonces pensé que invitándoles a nuestra boda te podrías financiar los estudios.

- Pero Mary, ¿Qué es lo que sacas tú de casarte conmigo?

- Yo solo quiero que tú estés bien. Que sigas siendo mi compañera de piso y.. (más bajito dijo) y de vida. Y si para eso necesitas que me case contigo..pues ¡Que me casooo! - soltó la morena para quitarle tensión a la situación. - además seré la envidia del mundo entero porque me caso con la más guapa de España- 

Alba seguía emocionada y Natalia le abrazó, cogiéndola y levantandole del suelo. Tras un abrazo que al menos para ellas duró una eternidad, Natalia la bajo y le puso el anillo. La rubia lógicamente no había comprado nada pero se quitó uno de los que llevaba y se lo puso a la de Pamplona.

Alba se dejó llevar y besó a Nat de agradecimiento por todo. Era un simple pico pero la morena no se esperaba este beso y puso cara de sorpresa como siempre que los labios de Alba estaban cerca de su cara  (aunque en realidad su cara de sorpresa era de felicidad) lo que preocupó a Alba que enseguida se apartó y se puso a disculparse:

Perdona Natalia por besarte. A veces siempre que me emociono se me va la pinza.

No pasa nada Albi, ahora estamos prometidas. - contestó la de Pamplona con una sonrisa en la cara.

Ambas se pusieron a cantar Someone Like you que seguía sonando en el móvil mientras se miraban fijamente cantándose la una a la otra.

Volvió a sonar un timbre y Natalia no pudo evitar gritar: ¡Que no hay nadie!

Alba se empezó a reír con uno de sus míticos ataques de risa mientras buscaba su móvil que era el causante del sonido de timbre. Al poco lo encontró, era su hermana Marina que quería hacer una videollamada. Alba aceptó y Marina apareció en su pantalla:

Hermanitaaa... Uy, Hola Natalia- dijo la hermana de la rubia.

¡Hola guapa más que una guapa!- saludó Nat con su sonrisa.

Marina se quedó un poco en shock por ese cumplido y las caras de felicidad rebosante que tenían las compañeras de piso. Por eso preguntó:

¿Os ha tocado la lotería o algo?

-Casi... nos vamos a casar. - contestó la morena

A Marina le cambió la cara y empezó a hablar rápido de la emoción: ¡Felicidades! Ya era hora de que estuvierais juntas pero ¿no es un poco pronto para que os caséis? Qué sois muy jóvenes. Pero bueno no me extraña con el encoña...

Ninguna de las dos tenían claro si el casamiento era real o no porque no lo habían hablado hasta ahora. Es decir, sabían que ellas sentían algo más hacia la otra. Pero no sabían si era reciproco o si la boda iba a ser necesaria hacerla de verdad o con invitarles a una boda ficticia valía para conseguir dinero y los regalos que necesitaba Alba. 

Alba sabiendo que su hermana iba a soltar cómo ella había hablado de lo mucho que amaba a Natalia desde que la conocía, la cortó al instante.

A ver que la boda no es real. - interrumpió la rubia bajita.

Natalia, un poco bastante decepcionada, le siguió el rollo a Alba para quitarle la cara de no entender nada a Marina.

- De momento vamos a invitar a gente famosa en el mundo entero a nuestra boda para que nos regalen cosas que Alba necesita para su carrera. O si nos regalan cosas caras las revendemos. Así no tendrá que volver a Valencia y seguirá siendo mi compañera de piso.

Marina no entendía nada. Para ella este plan no tenía ni pies ni cabeza. Pero bueno estaba claro que esto solo tenía dos formas de acabar: O se casaban siendo amigas y algún día descubrirán su encoñamiento o acababan mal pero Alba con dinero para la carrera. Esto último no creía que pasara porque Alba y Natalia para ella ya estaban más que casadas. Sí son matrimonio ya: vivían juntas, cantaban juntas, la mayoría de las veces compartían cama según lo que le contaba Alba, salían de fiesta juntas, compartían ropa, iban a la misma universidad... lo hacían todo juntas. Además, Natalia y ella ya se conocían y a su padre. Ella conocía a Elena y la consideraba su familia también. Por no hablar que el instagram de Natalia parecía una cuenta fan de Alba. El de su hermana solo tenía una foto de ellas dos juntas. Aunque había descubierto que una tal Julia, , una motera muy guapa, le había etiquetado en una foto donde salía su hermana dándole un beso en la mejilla. 

- Ajá, entiendo todo. Spoiler: No. Pero bueno ¿os puedo ayudar en algo, matrimonio? - contestó Marina a Natalia.

- Pues ¿Nos puedes diseñar las invitaciones de boda en castellano y en inglés?- preguntó Alba

- Ellaaaaa que es bilingues bisexual aunque solo le falta controlar un editor de imágenes. ¿Lo quieres también en francés?- le contestó a su hermana. 

- Marina te amo mazo ahora mismo. Mándanoslo cuando puedas, de mientras nosotras tenemos que organizar nuestra boda. Agur!

Natalia colgó a Marina, cogió de la mano a Alba y le llevo a su cuarto.

Alba no sabía que estaba pasando. ¿Ahora que estaban prometidas oficialmente iba a dormir con ella en la misma cama? Definitivamente tendría que ir de compras o pedir para la boda más pijamas de abuela porque durmiendo con ella los arruinaba todos. Sobre todo cuando a Natalia le daba por besarle el cuello. Si seguía haciendo eso cuando dormían juntas se le iba a escapar un gemido y con su voz no pasaría nada desapercibido. Es por ello que hoy, para dar un respiro a sus hormonas, intentaría no dormir con Nat.

- Albi, es tarde, mañana organizamos lo de la boda. Hablaré con gente que nos mandará direcciones de gente importante o famosa y tú podrás hacer la lista de lo que quieres y necesitas. Pero ahora... ¿Me ayudas a mudar la cama?

- Yo voy a hacer la cena, peleate tú con tu cama. - y Alba se marchó corriendo como una bebé.

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