Síganme en Instagram
Sweetheart00881.
Desperté como todos los días, horrible. Con el cabello despeinado, saliva seca en mi mejilla, y sin poder con mi alma. Observé el reloj que estaba colgado en la pared de mi habitación, éste marcaba las 10:37 a.m.
Hoy es sábado y por fin iré a comprar mi nueva computadora, ya que la anterior papá la había dañado y esta vez me va a dar la libertad de escoger la que yo quiera, con tal de que no se salga del presupuesto. Me levanté de mi cama como pude, tomé la toalla que estaba en un perchero, y entré al baño para asearme.
Al cabo de veinte minutos salí de mi habitación, vestida con unos jeans no muy ajustados, una blusa color rosa pastel, unas vans y mi cabello rizado totalmente definido, o algo así. Mi cabello siempre ha sido un problema para controlarlo, muchos dicen que me haga el alicer brasileño para tenerlo liso como el de mi hermana, Katherine, pero no, odio ir a las peluquerías, prefiero quedarme con los rizos. Bajé las escaleras hasta llegar a la primera planta donde estaba toda mi familia; mi papá, mi mamá, mi hermano Daniel, mi hermana Katherine y finalmente, yo.
Todos desayunamos en silencio, siempre lo hacíamos así desde que perdimos la confianza con papá. Nuestros padres están en proceso de divorcio, puesto que papá le fue infiel a mamá, y tiene otro hijo el cual no conocemos. Aunque yo sigo siendo la princesa de papá, creo.
Soy la menor de los tres, Daniel tiene 18, Katherine tiene 16 y yo, 14. Somos unos adolescentes, no sé cómo mamá nos soporta.
-Luce, vamos. - Habló papá, serio.
Asentí, me levanté de la mesa, le di el último trago a mi jugo de naranja y caminé al garaje donde papá guardaba su camioneta. Subí al asiento trasero y me coloqué el cinturón de seguridad.
Observé el suelo del carro y había juguetes de niño y un flotador desinflado, sigue mintiendo.
Partimos al Mac Center, le rogué por una así desde hace un mes, y por fin aceptó. Al llegar papá aparcó el auto frente del local, bajé rápidamente y entramos, empecé a buscar la laptop que más me gustaba y encontré una en pocos segundos. Llamé a papá y me dijo que sí, así que él fue a pagar en la caja. A mi lado estaba una chica utilizando una computadora de muestra para chatear en una desconocida red social.
-Hola, disculpa ¿cuál es esa red social?-Pregunté.
-Oh, es Facebook ¿sabes qué es? - Preguntó. He escuchado a mis compañeros hablar de ella, pero nunca me he interesado en tener una cuenta. Así que negué-. Puedes hablar con tus amigas, hacer vídeo llamadas y cosas así. Yo no hablo con conocidos, - Soltó una risa traviesa, que era contagiosa y me uní a ella-, hablo con gente desconocida, por un grupo que es genial.
-Oh, por cierto mi nombre es Lucinda Shelley. -Estiré mi mano para estrecharla con la de ella.
-Que maleducada soy, - golpeó su frente con su mano suavemente, - mi nombre es Caroline Waters.
Estrechamos las manos con un leve apretón y me dio un abrazo de repente.
-Me has caído muy bien, Lucinda. -Me dijo sonriente.
-Tú a mi igual, Caroline. - Sonreí de igual manera.
-Luce, es hora de irnos, te espero en el auto. - anunció papá saliendo de la tienda con una bolsa.
- ¿Tienes WhatsApp o número para llamarte? -Preguntó Caroline.-Digo, si quieres.
-Claro, anota 876954310, llámame cuando quieras. - Le dije.
ESTÁS LEYENDO
Amor a Distancia [PRÓXIMAMENTE EN LIBRERÍAS]
Chick-LitEstar enamorado conlleva a que un conjunto de emociones y sentimientos salgan a flote. Es esa sensación de necesitar ver, abrazar, sentir y tocar a la persona que tanto amas. Sientes que el reloj se detiene y junto a él, el mundo. Y en ese instante...