Fue en una pintoresca mañana cuando Namjoon conoció a Taehyung, accidentalmente chocaron ya que el primer mencionado se encontraba leyendo el periódico, ambos dirían que fue amor a primera vista, y lo fue.
No dudaron en intercambiar números y salir a citas, el más alto siempre le daba flores o regalos al menor, cortejándolo hasta volverse digno de pedir su mano. Pasaron dos años de conocerse y tres de noviazgo para que finalmente pudieran ser algo más. La vida era perfecta para ellos, se amaban y peleaban, lloraban y reían; no podía ser mejor.
Pasaron seis años para que ellos hubieran decidido adoptar un niño, la espera tomo tiempo ya que aparte del papeleo se les convirtió en un problema el hecho de que ambos eran dos hombres, meses y meses después pudieron sostener a su pequeño de dos años, Jungkook. Él era un niño precioso e inteligente, la familia acostumbraba a molestarlos diciendo que la inteligencia la había heredado de Namjoon, eran felices en su pequeño hogar.
Los años llegaron y con ello el éxito de ambos, Namjoon pudo abrir su propia compañía junto a sus mejores amigos y compañero de la universidad, y Taehyung pudo lograr su sueño de ser maestro, amaba su trabajo y amaba a los niños. La vida de la familia Kim cambio para bien, se mudaron a una casa más grande, la empresa del mayor era exitosa internacional mente y el menor tuvo un ascenso. Para ese entonces, el hijo de ambos tenía diez años.
Fue cuando Jungkook tenía trece que las cosas comenzaron a cambiar, ya era más normal encontrar a Taehyung mirando a la nada durante horas, había que tocarlo para sacarlo de su trance, extrañamente él siempre decía que no recordaba quedarse quieto durante tanto tiempo.
Dos meses después, en la casa de los Park apareció Taehyung preguntando por un celular, cuando Jin decidió salir a ver que pasaba reconoció a su hermano pero él no sabía quien era.
- ¿Disculpa?- Taehyung frunció el ceño aferrándose a la bolsa de la compra en su pecho.- Creo que me confundes con alguien más.
- Taehyung, ¿De qué estás hablan-
- ¿Por qué sigues diciendo mi nombre y actuando como si me conocieras?- El de tez bronceada comenzó a sudar y a entrar en pánico, él no conocía a ese hombre pero seguía atosigándolo con preguntas; él solo quería llamar a su esposo. Cuando Jin ya comenzaba a perder su paciencia fue cuando Jimin, su esposo y mejor amigo de Taehyung apareció.
Él noto como su esposo y amigo peleaban y decidió acercarse a intervenir pero la conversación que tenían lo dejo confundido.
- Hey, ¿Qué está pasando?- Dándole un beso a su esposo y dispuesto a saludar a su amigo lo encontró en trance, mirando hacia el suelo con los ojos abiertos, mirando a su esposo extrañado vio como esté miraba a Taehyung preocupado, antes de poder preguntar que era lo que estaba pasando, Jin se adelanto y se acerco al Kim menor a paso lento.
- ¿Taehyung?- Jin sacudió levemente su hombro.- ¿Estás bien?
Sosteniendo su cabeza con fuerza mientras soltaba pequeños quejidos, Taehyung se recostó en la puerta, sin perder ni un segundo más, Jimin lo tomo de los hombros y lo guío dentro de su hogar. Una vez que los tres se encontraban sentados Jin decidió volver a preguntar.
- ¿Taehyung?- Tendiéndole un vaso con agua, el rubio espero.
- ¿Umm?- Él castaño lucia desorientado pero aún así tomo el vaso. Una vez que su mareo se calmo decidió mirar a su alrededor para extrañarse más, ¿Qué hacia él en la casa de su hermano y su mejor amigo?- ¿Por qué estoy aquí?
Jimin no podía estar más confundido, ¿Qué le pasaba a Taehyung?
- ¿Estás bromeand-
- ¿Taehyung, no recuerdas nada?- Jin interrumpió a su esposo concentrándose más en el pequeño que lucia perdido, al ver como él negaba con la cabeza lo miro con preocupación.