Después de una dolorosa ruptura un joven ingles conocerá a manos de su amigo a cierta joven italiana y de esa manera poner sus mundos de cabeza.
- "He estado bebiendo, ¿por qué no puedo mantener mis dedos lejos de ti, bebe?"
gwilym lee x lectora
...
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Eran aproximadamente las 2:40 de la mañana en unos minutos el bar tenia que cerrar, ya se veía un poca más desalojado y los trabajadores empezaban a asear todo, mientras Inha limpiaba su lugar de trabajo con un trapo húmedo de esa manera agarrando monedas que se encontraban ahí, como era lo habitual.
Mientras tanto los chicos seguían con una energía tan fresca que parecía no tener fin, y le gritaban a Inha para que se uniera a ellos en la casa de Ben.
—Perdonen chicos pero mañana es si mal no recuerdo, jueves, y tengo que seguir trabajando.— contesto Inha al ver que los muchachos insistían tanto.
—Es verdad ragazza, chicos ella cuida a mi sobrino Jonathan.—
—Oh! ¿al pequeño Johnny?— pregunto Rami con curiosidad.
—Si, de echo Joe, Mary me pregunto por ti hoy ¿esta todo bien?— la italiana pregunto esta vez a Joe, de igual manera preocupada.
Joe respondió un tanto serio y murmurando —Si gracias, dile que le hablare cuando este desocupado.—
El ambiente se tenso un poco, a si que Ben se despidió de la chica y al mismo tiempo los chicos imitaron su gesto.
—Bueno Inha, nos vemos después en realidad me hubiera gustado que nos acompañaras.— Esta vez dijo Gwilym sonriendo de manera amable a Inha.
—Si Inha nunca esta de más una buena bartender, Joe dijo que eres de las mejores.—
Inha agacho un poco la cabeza con una sonrisa al escuchar el halago de Rami.
—Oh bueno gracias chicos, pero enserio, el deber llama. Otro día será en definitiva.—
—Si tu lo dices. Nos vemos Inha.— poco a poco los chicos se iban subiendo a su carro mientras se alejaban de la mirada de la joven.
—Oye niña, ¿te llevo?— Esta vez se acerco Rhonda a la italiana al ver que ya era de noche.
—Si gracias Rhonda, de todas maneras ya es costumbre ¿no lo crees?— sonrió la joven al subir al carro de su amiga.
* * *
Hoy era viernes y al igual que siempre Inha se levantaba por el ruidoso sonido de su alarma que le desesperaba tanto.
—Otra vez tarde. Bien hecho Inha.— pensó la joven cuando salía a paso apresurado en camino a la casa del pequeño Johnny.
Cuando llego a su destino saludo a la señora Mazzello como todas las mañanas y a Johnny quien le sonreía de manera amistosa.
—Hola Mary y hola a ti pequeño.— dijo la joven al ver a las dos personas que la esperaban.
—¡Hola Inha!— dijo el pequeño con su clásica sonrisa de oreja a oreja. —Inha Hola.— esta vez respondió la señora.
—Por cierto, Mary ayer vi a Joe y le comente que preguntaste por el.—
—¿Enserio? y ¿que te dijo?— pregunto Mary al escuchar a la joven hablar sobre su hermano.
—Dijo que hablaría contigo cuando este libre de sus grabaciones.— Inha contesto con una sonrisa de lado al mismo tiempo que le agarraba la mano al pequeño para empezar a caminar.
—Gracias Inha! y que tengas un buen día. Adiós hijo!— sonrió la mujer mientras movía su mano de un lado al otro.
—Adiós mamá!— contesto Johnny cuando ya se alejaban de su casa poco a poco.
—Bueno pequeño a caminar o se hará tarde.— comento la chica al ver la hora que indicaba su reloj en su muñeca izquierda.
