Saturno.

317 47 7
                                    

  Cuando ella llegó podría describir de mil y un formas lo que pasó por mi cabeza. Tal vez en aquel tiempo yo hubiera mencionado lo guapa que era, lo delicadas que se veían sus uñas y lo sedoso de su cabello. La falda escolar ondeando a medida que ella caminaba, la forma en cómo sus manos jugaban de allí para allá. Y como sus labios danzaban en una melodía hermosa.

  Si pudiera capturar un momento hubiera sido ese, Saturno, todo lo que me hizo sentir. Oh hermosa chica, caí rendida a tus pies. Oh hermosa chica, rogando por más me tienes.

  Las primeras palabras que compartimos quisiera recordar, pero mi pésima memoria me obligó a borrar ese recuerdo. Oh, Saturno, ¿qué hermosa melodía dijiste con tu fantástica voz? ¿qué secreto revelaste? ¿qué canción me cantaste?

  Porque yo sólo era un chica, joven e inexperta de la vida. Porque tú lo eras todo, porque en ti ví el universo reflejado en tus ojos. Saturno, única e imparable.

  Lo que compartimos, lo que dijiste, ¿qué dijiste? ¿Un hola, tal vez? ¿o una ayuda, para la tarea de álgebra? Oh querida Saturno, no soy buena en álgebra, te habría hecho reprobar.

Cuando hablaba por mensaje aquel día con HyeJin, sin importarme que me vieran, riendo sobre alguna anécdota, tú decidiste aparecer. Cruzaste la puerta segura y con frente en alto, pero un sonrojo en tus mejillas, Saturno ¿sentiste vergüenza esa vez? ¿pensaste que era guapa en algún momento?

  Lo hermoso que fue apreciarte por primera vez, como ver las estrellas fugaces jugar en el cielo, o dos galaxias uniéndose en una. El hermoso contraste de la Luna y el Sol. Hermosa Saturno.

Me llamo Moon Byul Yi. Por favor, cuiden de mi.

  Oh hermosa falda color azul, que aunque todas las chicas usaban, se veía hermosa en ti. Oh hermosa chica, hermosa Saturno, llévame a bailar en tus anillos.

  Lo maravilloso que fue verte después, lo cercanas que fuimos, lo bien que nos caímos. Me llevaste a volar, me enseñaste a brillar. Oh mi hermosa chica, sólo deseaba verte más tiempo.

Kim Yong Sun.

Moon Byul Yi, pero tú llámame MoonByul. Es un gusto.

—El gusto es mío.

La calidez de tu mano, la suavidad que tenía. Lo perfectamente bien que encajaban juntas, o cariño, tú y yo nacimos la una para la otra.

  La felicidad del momento, la ansiedad y confusión. Yo te amaba cada día más, yo te deseaba cada minuto más fuerte. Yo te quería, Saturno, te quería más que a mi propia vida.

  Nunca debimos confundir nuestro amor, pero vida mía, no pude evitar caer en tu órbita. No pude evitar, enredarme en tus anillos.

—Esto no está bien YongSun.

—Shhh, no hables, pequeño Saturno, sólo déjame elevarte.

Unnie...

  Ese día te bese, Saturno. Ese día ambas sentimos éxtasis. Bailé al compás del ritmo de tus anillos, tú bailaste al compás de mi corazón enamorado.

  Saturno, si cometimos un error fuí yo, si hicimos algo mal fuí yo. Mi hermosa Saturno, te veías tan hermosa. Tan maravillosa, con tus mejillas sonrojadas y pupilas dilatadas. Toqué el cielo, Saturno, con sólo probar tus labios fue perfección, perfección y divinidad. Fuego y descontrol, amor y furia, lujuria y pureza. Pero yo quería más, quería robar tus ojos, Saturno.

Saturno── ⋙MOONSUNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora