DELICATAE ( las chicas de madame Juliette T1)

capítulo 11

Los días pasaban y las buenas lenguas por parte de los soldados acerca del burdel y de las chicas, habían dado sus frutos. No daban a basto con tantos clientes, aún así, pedían a madame Juliette que no les quitaran trabajo.
Sahira y Oana, cada vez estaban más adaptadas a ellas y a las normas, la rumana, hacía todo lo posible para que sus compañeras la perdonaran haciendo de más en su trabajo. Algunas lo veían pero aún así, mantenían las distancias, no se fiaban de ella...
Sahira en cambio, se había ganado a todas, no solo por el respeto que daba, sino por las enseñanzas de su país que les mostraba a ellas para que aprendieran algo nuevo, como el idioma, y ella también era muy buena alumna.
Juliette se sentía orgullosa de todas ellas, cada vez aprendían más y parecían cuasi perfectas.
Lucía iba aprendiendo cada vez más el arte de la seducción, pero hacía unos días atrás, que ya le habían comentado algo que no pensaría en hacer nunca... Masturbarse. Tenía que saber lo que era el placer, le daba vergüenza... En un par de ocasiones lo había intentado, pero acababa riéndose cada vez que se tocaba la zona. Sobretodo porque solo podía hacerlo con sus dedos, al ser virgen, no podía utilizar una cosa que llamaban consolador. Era el tamaño de un pene, y por lo visto, daba mucho más placer...
La noche anterior, consiguió masturbarse sin reírse, por una extraña razón, le gustó. Era una sensación extraña, pero aliviaba... Aunque no salían esos gemidos que había escuchado a sus compañeras hacer cuando estaban con clientes. Lisa, le explicó que era normal, no era lo mismo.. ya lo entendería cuando le tocara...

Para esos días, uno de los chivatos de Juliette, llegaba a delicatae con noticias, y no eran buenas...

• Juliette - junior! - lo abrazó - qué haces aquí?!

• junior - hola madame - decía en tono serio

• Juliette - que ocurre? Siéntate - se sentaban a las butacas del salón - Evangeline, trae café para nuestro invitado

• Evangeline - enseguida madame - salió rápidamente a la cocina

• Juliette - y bien? - lo miró - que pasa? Porqué estás tan nervioso?

Junior cogía aire y se rascaba la nuca con impaciencia - verás, me han dado una información que no es muy buena... Creo que..  si - elevó la vista - tienes que coger a tus chicas y salir del país. Venir conmigo, os protegeré en mi granja

• Juliette - no digas tonterías junior, haber, ves por partes... Porqué deberíamos huir?

Evangeline entraba con el café y les servía a cada uno, luego, salía de nuevo dejándolos solos, vio a las chicas como siempre curioseando tras la puerta - algún día os llamará la atención si os pilla

Las chicas solo le contestaron... - shhh - poniendo sus dedos encima de sus labios.
Evangeline, rodó los ojos y volvió a la cocina mientras ellas seguían detrás de la puerta del salón intentando escuchar

• Juliette - bien, dime junior, explicate

• junior - he oído no solo rumores Juliette, son reales ..  - se acercó más a ella - por lo visto, los franceses quieren venir a Londres y hacer una emboscada... El Rey, ha decidido esperarlos a la frontera

• Juliette - entonces? Si van a estar allí, no tenemos de que preocuparnos

• junior - la cuestión es... - dejó la taza encima de la mesita - Juliette, el puerto, estará casi sin protección... Cualquiera podrá venir a saquear, incluidos los...

• Juliette - piratas - terminó por él

• junior - exacto. Todos los soldados, están fuera y los que quedan aquí, se irán hacia la frontera, incluso es posible que lleguen a salir de Inglaterra, y Londres quedará desprotegida