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Había sido un excelente día, demasiado bueno para ser verdad, pero aún no acababa y tanta felicidad se fue al traste en solo unos instantes, cuando un grupo de jóvenes ninjas reían en el parque senju, una adolescente contrariada en casa de su abuelo esperando por su enamorado para darle una respuesta adecuada, una pareja y su hijo pequeño caminaban de regreso a casa, y una joven corría a la casa del chico que le gustaba para verificar su salud. Todos eso ocurría en el preciso instante en que una gran cantidad de invasores enemigos penetraba la barrera de la mas grande aldea oculta ninja, Konoha. 

El albino cubrió con su cuerpo a Sarada junto a Ikuto en los brazos de ella, quien reaccionó segundos después, algo había aterrizado en casa de los Uchihas, con violencia en varias oportunidades como una ráfaga de ataques continuos, cuando ellos estaban por llegar para cenar, los escombros no alcanzaron a retumbar en el cuerpo de Mitsuki, Sarada había activado el susano protegiéndolo, Mitsuki saco una serpiente pequeña de su brazo, la serpiente blanca que fue en busca de su hermana cuanto antes. 

De la construcción en ruinas vieron un cuerpo volar por los aires con mayor fuerza que con la que cayó, y luego vieron a Sasuke saltar al exterior con su espada envuelta en rayos partiendo lo por la mitad sin vacilación, Sakura salio instantes después con otro cuerpo inerte entre sus manos arrojándolo lejos completamente destrozado. 

-¿Están bien? -preguntó al verlos colocándose unos guantes en sus manos. 

-Si mamá.

Sasuke se trasporto al lado de su mujer reemplazando un escombro por él mismo, haciendo uso del kamui -pongan a salvo a Ikuto ahora mismo. 

Un viento se arremolino junto a ellos revelando la figura de Ryoko, quien transformo uno de sus brazos en una enorme serpiente negra que engullo sin aviso a Ikuto en los brazos de Sarada, la chica modifico su forma hasta situar al niño dentro de su estomago, un proceso repulsivo y difícil de ver, pero muy necesario para trasportarlo sin ser visto. -Me lo llevaré.

Cuando la chica comenzó a correr, Mitsuki se movió con ella sin hablar, pero Sarada lo dudo un momento, la mirada de sus padres la impulsaron, ellos habían sido atacados directamente, era seguro que eran blancos principales en aquel ataque, y mientras corría a toda velocidad persiguiendo a los hermanos y resguardando la seguridad de Ryoko que ahora valía por dos momentáneamente, escuchaba diversos ruidos de agitación y por todos lados en la aldea, impactos, estruendos por doquier, derrumbes de edificios, el caos, las explosiones, los llantos y gritos de batalla estaban aturdiendo sus oídos. 

Ryoko mientras corría dio un salto y se volteo para esquivar, más contraatacar a un sujeto vestido de blanco que se lanzo contra ella, su gracilidad le ayudo y cuando lo tuvo de espaldas le disparo una bola de fuego enviándose lo directo a Mitsuki quien sin perder velocidad lo atravesó con sus uñas modificadas, dándole muerte al instante, la Uchiha se vio manchada con la sangre que salpico sobre ella, pero no se detuvo, esto era guerra. Continuaron su camino directo al norte de la aldea y al llegar al limítrofe fronterizo Ryoko uso doton para cavar por debajo de la aldea, Mitsuki jaló a Sarada al interior, dando un salto dentro de la cueva hecha por Ryoko, sosteniéndola de la cintura con fuerza, la cavidad de tierra se cerro tras ellos, Sarada no podía ver nada ya que todo se encontraba en completa oscuridad, hasta que él mismo que la sostenía partió una una vara que se ilumino dándosela a la Uchiha, se dio cuenta que los hermanos no necesitaban la luz para movilizarse, de todas formas Mitsuki no la soltó, la tomo con fuerza de la mano guiándola por el pasadizo abierto por su hermana.

-Con que estas eran las coordenada que me habías dado -dijo Ryoko rompiendo el silencio.

-Era la entrada auxiliar que usábamos cuando nos colábamos escondidos a la aldea -Explicó Mitsuki a las dos antes que hicieran más preguntas.

No es obsesión, se llama amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora