Bajé a un bar que estaba en mi misma calle y me pedí una copa, me daba la impresión de que yo era la única que estaba perdida en el mundo. Todos se lo pasaban bien a mí alrededor, ya fuese con sus amigos o con sus parejas. Me pedí otra copa más, o puede que dos, ya no sé. Quiero olvidarme de todo, amo a un chico que nunca me amará, pierdo a mi novio y mejor amigo y también echo de menos a mis amigas de toda la vida. No sé si me puede pasar algo aún peor.
Unos chicos se acercaron a hablar conmigo pero no les hice mucho caso aunque al final no sé porque me fui a sentar con ellos. Hasta me invitaron a unos chupitos. Me estaba sonando el móvil y casi no lo encuentro.
- ¡Holaaaaaaa!
- ¿_____, estás bien?
- Sí, espera que aquí hay mucho ruido- me levante de la mesa intentando no caerme del mareo que tenía encima. Salí fuera para hablar mejor.
- Me alegro de que me hayas contestado. Escucha necesito que hablemos ____, lo siento mucho, por todo.
- Te vas con todas Harry.
- Lo siento mucho ___, yo solo te quiero a ti.
- ¡Oooooohh Harry, eres un encanto! Yo también te quiero- me empecé a reír.
- ¿Lo dices en serio? ¿____, estás borracha? ¿dónde estás?- este chico hace demasiadas preguntas.
- A ver, estoy bien, no te preocupes. Estoy en un bar con unos amigos.
- ¿En qué bar? ¿con que amigos?
- En uno que está en mi calle. Son unos amigos nuevos, no sé quiénes son.
- Será una broma- Harry sonaba muy serio.
- ¡No qué va! Te tengo que dejar porque me están esperando.
- ____ no te vayas con nadie, vete a tu casa por favor.
- No te preocupes, no soy una niña pequeña.
- Pero estás borracha.
- ¡Qué nooo!- grité- adiós Harry ya hablaremos.
Volví a entrar en el bar y los chicos sonrieron al verme.
- ¿Otra copa preciosa?
- Claro- me senté y seguí bebiendo con mis nuevos amigos.
Al cabo de un rato se levantaron para salir del bar, uno de ellos me agarró para que no me cayese.
- ¿Quieres ir a casa?
- Sí, pero voy yo sola.
- Te acompañamos- me dio una palmada en el culo.
- ¡No me toques!- le solté un bofetón.
- No vuelvas a hacer eso- me amenazó mientras me agarraba muy fuerte.
- ¡Venga hombre! Con lo bien que lo estábamos pasando- intervino el otro tío.
No me encontraba bien, solo quería irme a casa. No sabía qué hora era pero no se veía a nadie por la calle y mi casa ya no estaba lejos pero no quería que supieran donde vivo.
- Eres muy guapa- se acercó a mí y me besó bruscamente. Me agarraba la cara y no me podía apartar, tenía mucho miedo. Una lágrima cayó por mi mejilla.
- No te pongas triste amor, si ahora viene lo mejor- se miraron entre ellos y se rieron y aproveché para salir corriendo.
- ¿A dónde te crees que vas?- me alcanzaron en seguida y me pegaron contra la pared.
- ¿Dónde vives?
- No te lo voy a decir- me puse a gritar pero me tapó la boca, nadie aparecía por la calle.
- Está bien, yo te lo decía por tener un poco más de intimidad pero bueno…
Uno de ellos me agarró los brazos muy fuerte y me inmovilizaba las piernas, mientras el otro empezaba a tocarme por todas partes.
- ¡Socorro! ¡Suéltame!- ellos se reían. Me sacaron la chaqueta de un tirón y me bajaron los pantalones. Hacía mucho frío y no podía parar de llorar, estaba horrorizada, no podía moverme ni hacer nada. Sabía lo que iba a pasar como no consiguiese escapar de alguna manera, me estaba mareando demasiado.
Un coche negro apareció por la calle y grité antes de que me lo volviesen a impedir, creo que me voy a desmayar, ya no tenía fuerzas. En ese momento me pareció que el coche se paraba.
- ¡______!- esa voz me sonaba, Harry- ¡Hijos de puta, alejaos de ella!
Harry le dio un puñetazo al que no me dejaba de toquetear y luego le dio una patada en la barriga. Con el otro creo que tuvo que pelear un poco más y creo que a él también le dieron.
- ____ ven aquí- me subió los pantalones y cogió mi chaqueta- dame tu bolso.
- Harry me mareo- me cogió en brazos y me metió corriendo en el coche.
- Tenemos que salir de aquí- me acostó en la parte de atrás, creo que dio una vuelta a la manzana para ver que lo tíos se habían ido. Cogió mis llaves y conmigo en brazos abrió la puerta.
- Gracias- me acostó en la cama.
- Ahora no hables, descansa- se sentó a mi lado.
- Harry no te vayas, tengo miedo- le agarré la mano muy fuerte.
- No voy a ningún sitio, te quiero ____- y me quedé dormida.