¿Pero, quién descuido a quién? Lo intente. Lo intente tanto que ya no me queda ni una sola gota de energía para continuar con esta farsa. Entregué, y perdí cada una parte de mi ser. No hubo nada a cambio para mí: Como si fueses un desierto que se traga todo lo que intenta caminar a su lado.
Me caí... y no me ayudaste.
Por lo que... si ahora soy yo quien te deja caer. No es, ni será mi culpa.
—¿A dónde vas? — consulto Karamatsu pasos delante de mi en esta calurosa tarde de verano, los pavimentos se llenaban con personas alegres, yo no era una de ellas, y quizá pronto él tampoco lo sería —.
—A casa.
Conteste. Mi mirada estaba sobre él. Karamatsu tembló, como si mis ojos (c/o) fuesen un tempano de hielo emanado su frialdad. Más, en está situación yo no era un hielo, y mis ojos no lo eran tampoco, solo estaban cansados de intentar... todo ese amor que entregue desapareció en un punto.
—But, ese no es el camino correcto a casa.
—Me voy a mi casa.
Me miro confundido. Muy confundido. Sin comprender en que parte de la historia fue que se termino perdiendo. Si esta situación fuese diferente, y sus ojos me mirasen con esa confusión y miedo me hubiera acercado sin dudas para abrazarle, pero... no era ese tipo de situación.
—¿A qué te refieres, my darling?
—Estoy muy cansada...
—Si ese es el problema puedo llevarte.
Se acerco, tomando mi mano entre las suyas.
—Se acabo.
Todo el color en su tono de piel se fue, dejándolo tan pálido como un papel. Sus manos tomaban la mía con desesperación, con miedo, apretujándola para no soltarme. Y eso ciertamente me dolía.
—Why...? Why? What is wrong?
—Lo intente. — y está fue la cuenta regresiva para que se extinguiera absolutamente todo — Estoy cansada. Mencionaste que querías conocerme, intenté hablarte de lo que amaba hacer, incluso te quise incluir pidiendo ideas, incluirte... era importante para mí. Y tú... no me escuchaste para nada. Cuando tú me contabas todos tus intereses, yo te escuche, incluso desde lo más diminuto, te di mi ayuda con tus canciones... para salir adelante como persona, y cuando te pedí ser solamente escuchada, no lo hiciste, cambiaste el tema por otras cosas, me lastimaste...
—I'm so sorry, my love! ¡Podemos solucionarlo, prometo escucharte!
—Sabias que nadie me escuchaba nunca, por eso cuando cambiabas los temas, me ignorabas... me hiciste un real daño. Lloré, y entonces... te di muchas oportunidades para que me escuchases, y nunca lo hiciste.
Di un paso atrás soltándome de su agarre a la fuerza. Quedándome con los brazos cruzados. Y él se quedo donde estaba, congelado.
—Podemos arreglarlo...
—Soy como un cristal: El cual tiraste. Quizá, la primera vez podía ser reparado, pero ahora solo soy fragmentos que no encajan con nada. Lo que ya está roto no puede ser reparado.
Pude notar el dolor en su rostro.
—Adiós...
—I love you! — dio un paso adelante, esperando como si fuese a arrojarme a sus brazos como solía hacer —.
—Adiós.
Me di la vuelta caminando de vuelta a mi casa sintiéndome libre. Posiblemente triste, pero era para bien. Rememore momentos: Más, cada uno de ellos me termino llevando a un camino agrio. Le hice sumamente bien en su vida, le hice feliz, le otorgue buenas cosas, apoyo incondicional, y no recuerdo muchos momentos en que me haya dado lo mismo. Por todas esas veces en las que me dejo caer...
Hasta un tempano de hielo es más cálido comparado a lo frío como es él.
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Perdón. Escribí esto ahora mismo en realidad. Perdón por lo sufrible que es este Fanfic en realidad. Pero, quería escribirlo para soltarme de una amistad que solo me está amargando la vida. Como se da en el mismo caso que en esta situación. Chicos, si no se sienten a gusto con amistades, o relaciones en donde no sientes, y sabes que no recibes lo mismo que estas otorgando, lo mejor es dar marcha atrás aún si le haces bien a esa persona.
Importas tú.
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Cold As You - Karamatsu
Fanfiction'Camine: Apartando de lo más frío. Un hielo, tan frío como tú.' A d v e r t e n c i a: DOLOR. (Esto no es un fanfic romance. Más que nada, lo contrarío. Leer bajo su responsabilidad.)